La escalada de violencia entre Israel y Palestina preocupa a la comunidad internacional, ya que hacía varios años que no se registraban hechos tan violentos. De todas maneras, desde Tel Aviv se anunció un plan para terminar no sólo con esta escalada, sino también con los bombardeos sobre Cisjordania. “El gobierno elaboró una hoja de ruta que terminaría en un alto el fuego definitivo de Israel hacia Cisjordania. El primer paso de este plan sería que Israel se quedase definitivamente con el cien por ciento de Cisjordania. Una vez que se cumpla este objetivo y que todo el territorio esté habitado por colonos israelíes, nuestras fuerzas armadas no dispararán un solo misil más. Y eso lo podemos asegurar, porque obviamente jamás bombardearíamos nuestro propio país”, declaró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. El mandatario considera que este plan es viable si hay buena voluntad de las dos partes. “Espero que los palestinos estén a la altura de las circunstancias y acepten entregar Cisjordania a las autoridades israelíes. Si de verdad quieren una paz sólida y duradera, creo que deberían hacerlo”.
El tipo de cambio: al cierre de esta edición, la vida de un israelí estaba cotizando seis palestinos.