La agencia de inteligencia de Estados Unidos hace año a año un relevamiento del rendimiento de sus empleados, incluso de aquellos contratados para labores de espionaje. Una de los datos que más llamaron la atención de la evaluación realizada este año fue que el uruguayo Luis Almagro, actual secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), obtuvo el puntaje más bajo de todos los empleados de la CIA. “Es uno de los peores espías que han pisado la agencia. No sólo mantuvo una relación con una subordinada prácticamente a la vista de todo el mundo, logrando que toda la atención se centrara sobre él, sino que además operó para la derecha latinoamericana en forma completamente evidente, sin ningún tipo de sutileza. Al parecer, esta persona no entendió que uno de los principales requisitos de un espía es que haga las cosas en forma muy, pero muy discreta”, explicó un funcionario de la CIA. La actuación del uruguayo al frente de la OEA motivó un pedido de investigación por parte del Congreso de Estados Unidos. “Justo lo que necesita una agencia de espionaje: que el Congreso se dedique a examinarla. Quien decidió contratar a Almagro debería renunciar a su cargo”, sentenció el funcionario.

La aclaración: “Cuando hablamos de hechos aberrantes no nos referimos solamente al oso que pintó en la plaza Independencia de su país. Eso fue lo más aberrante, pero hubo otros episodios graves”. Parlamentario estadounidense con sensibilidad artística.