“Mentí. Me duele reconocerlo, pero mentí. Y mentí porque eso es lo que hacemos los adictos”. Con estas palabras el exdirector de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, Santiago González, anunció que padece una severa adicción al Oxa B12, un inyectable que se usa para tratar la ciática. González afirmó la semana pasada que se había atendido solamente una vez en el Hospital Policial, para recibir ese inyectable de emergencia, y que no había retirado medicamentos. Pero ayer se supo que en realidad se atendió cinco veces en policlínica, dos en emergencias y retiró medicamentos seis veces. “Soy una víctima de la crisis de los opioides. Ese inyectable que me dieron me volvió un adicto. Y, como cualquier adicción, con una dosis no es suficiente, y con el tiempo uno quiere cada vez más y más. Y si no consigue su droga, busca algo parecido. Por eso retiraba medicación. Eran analgésicos que usaba para zafar del síndrome de abstinencia”.

La acusación: “Es mentira que yo sea un corrupto. Eso es un relato falso que quiere instaurar el Frente Amplio. Soy un enfermo”. Santiago González, adicto en recuperación.