La situación del senador nacionalista y empresario está cada vez más complicada, ya que la Jutep lo intimó a cumplir con el fallo de la Suprema Corte de Justicia y presentar la declaración jurada de su esposa, Ekaterina Rybolóvleva. Además, y como si esto fuera poco, la hija del magnate ruso Dmitri Rybolóvlev le dio un ultimátum para que abandone el hobby de la actividad política, al que se dedica desde 2019. “¿Por qué no jugás al golf o coleccionás obras de arte, como cualquier millonario? Estoy harta de tus líos en Uruguay”, le habría espetado la heredera cuando comenzaron los conflictos por su declaración jurada de bienes. Ante la negativa de Sartori a abandonar su pasatiempo y la sucesión de fallos judiciales en su contra, Rybolóvena amenazó a su marido con informar a la policía secreta de Vladimir Putin que él se opone a la guerra en Ucrania. Si bien Sartori no tiene posición tomada con respecto al conflicto, ni sobre cualquier otro tema, su esposa está dispuesta a acusarlo falsamente con tal de que deje “esa estupidez de ser senador o candidato a presidente”.
El aviso clasificado: “Vendo por viaje: banca en la Cámara de Senadores de Uruguay. Tiene muy poco uso. La vendo por la tercera parte de lo que me salió porque no me importa demasiado tirar el dinero”.