Todo parece indicar que en este período se tratará nuevamente un proyecto de ley para que los militares condenados por delitos de lesa humanidad pasen a un régimen de prisión domiciliaria. El senador nacionalista Rodrigo Goñi, responsable del nuevo proyecto, afirmó que la prisión para represores mayores de 70 años no es un acto de justicia, sino de “venganza”. “La prisión no puede ser un instrumento para el martirio. Y tener una jubilación millonaria y no poder gastarla por estar en una cárcel, por más que sea una cárcel vip, es inhumano”, afirmó el senador.

Goñi reconoció que la prisión domiciliaria no les permitiría “disfrutar con total plenitud de sus haberes”, pero sí les habilitaría la realización de varias actividades que ahora les están vedadas, como ordenar cortes de carne premium y vinos finos por Pedidos Ya, comprar casas rodantes en Temu o, simple y sencillamente, guardar todo su dinero en un depósito y nadar en él como hacía Tío Rico.

La queja: “Después de todo lo que hice por la patria, ¿me pagan así?”. Militar que quiere un aumento de su jubilación.