Empresarios, trabajadores y autoridades departamentales coinciden en que la temporada de verano de 2021 ha sido, hasta ahora, de las peores en la historia del país. Una temporada “atípica”, “pobre”, “mala”, con niveles de ocupación radicalmente menores respecto de años anteriores en todos los destinos de veraneo; una modalidad vacacional centrada casi exclusivamente en los fines de semana y un nivel de gasto mucho más bajo de lo que se acostumbra en zonas normalmente concurridas por extranjeros, que suelen consumir más y más caro que los uruguayos.

Mientras que en un año “normal” los índices de ocupación en los balnearios de la costa este en temporada alta oscilan entre 80% y 90% -y en algunos casos llegan a 100%-, este año, en los mejores casos, se alcanzaron guarismos de entre 60% y 70%, sólo superados en algún fin de semana puntual, por ejemplo, en Rocha. El común denominador en enero, para todos los destinos turísticos, fue el turismo de fin de semana o de fin de semana largo, es decir, de jueves a domingo o de viernes a lunes, en lugar de la modalidad semanal o quincenal, explicó a la diaria el presidente de la Cámara Inmobiliaria Uruguaya (CIU), León Peyrou.

Según los datos de la CIU de enero, de los 38 hoteles que hay en Colonia del Sacramento están operativos 18 y trabajando a un 30%. Canelones registró entre 30% y 50% de ocupación en promedio, y el mejor desempeño lo tuvo Atlántida. En tanto, en Maldonado los balnearios más concurridos fueron Piriápolis y la franja que va desde el balneario Solís hasta Punta Colorada, con un índice de ocupación que ronda entre 50% y 70%. Por otro lado, una de las mayores víctimas del cierre de fronteras fue Punta del Este, con una ocupación de apenas 30%, según la CIU. Peyrou señaló que la situación “mejoraba bastante” los fines de semana, pero entre semana el balneario más lujoso del este “quedaba desierto”. Además, los precios de los alquileres se vieron reducidos en hasta 50% respecto de la última temporada.

El presidente de la Cámara Inmobiliaria Punta del Este-Maldonado, Javier Sena, coincidió en que la temporada actual es peor que la última, que incluso fue “paupérrima”, y recordó que a principios de 2020 el sector tenía la esperanza de que esta temporada fuera mejor. Sin embargo, debido a la ausencia de extranjeros, la ocupación en la zona este del país, principalmente en Maldonado, cayó en el entorno de 70%. Este “déficit” responde a que “normalmente Maldonado es visitado por 70% de extranjeros y 30% de uruguayos”, explicó, y es lo que diferencia a ese departamento del resto de la costa uruguaya.

El director de Turismo de la Intendencia de Maldonado, Martín Laventure, afirmó que esta temporada “se dio dentro de lo previsible desde el momento en que se tomó la decisión de cerrar las fronteras”. Si bien aclaró que es “muy difícil” medir la ocupación inmobiliaria “porque ya hace mucho que la gran mayoría de los alquileres no pasa por el circuito formal de las inmobiliarias”, indicó que “promedialmente Piriápolis se encuentra en 50%-60% los fines de semana” y Punta del Este en guarismos “un poco menores”. “No es la temporada que Maldonado necesita, sino la que se puede tener”, reconoció el jerarca, y consideró que es esperable que en febrero se desarrolle con las mismas características. Para Laventure, “era previsible también que Maldonado fuera uno de los departamentos más afectados, junto con Colonia, y que Rocha y Canelones se defendieran un poco más”, aunque aclaró que “dentro de Maldonado la realidad también es distinta: Piriápolis se está defendiendo un poco mejor de lo que lo puede hacer José Ignacio, que tiene un público mayoritariamente extranjero”.

Este turismo “de propietarios” que vacacionan sólo los fines de semana y sin extranjeros implica “grandes pérdidas para el comercio y para los trabajadores”, dijo Sena a la diaria. Esto se debe a que el visitante uruguayo gasta significativamente menos que los argentinos, por ejemplo, en restaurantes, supermercados y otros comercios: “El consumidor uruguayo básicamente viene con el baúl lleno a la costa y acá no gasta ni siquiera en el supermercado”, comparó el dirigente. En ese sentido, señaló que la cámara “entiende” la necesidad de cerrar las fronteras, pero afirma que esta medida “perjudica enormemente” al sector. “Hay trabajadores que se han quedado sin su empleo, como mozos, mucamas y jardineros; [a quienes] entre el gobierno y los empresarios va a haber que buscarles una solución”, aseveró.

Peyrou coincidió con Sena en que “los uruguayos somos mucho más austeros que los argentinos en todo lo que tiene que ver con el turismo”, y aunque admitió que en su cámara había una “ilusión de que la temporada más o menos se salvase”, esa es una posibilidad que ahora descarta. “Estamos en guarismos [de ingresos] 30% o 40% más bajos, y eso no da para cubrir los costos y mucho menos para pensar en una reserva para el invierno. Hoy por hoy, con las cartas vistas, me da la impresión de que el gobierno alguna mano va a tener que dar”, afirmó el empresario.

Rocha: está mal, pero no tan mal

En Rocha se repite la tendencia: turismo de viernes a domingo y un nivel de ocupación por debajo de 50% entre semana, pero con picos más altos durante los fines de semana que en otros departamentos. “La peor semana fue la del medio [del 4 al 10 de enero], con niveles de ocupación de 25%, pero después mejoró y tuvimos niveles de 50% entre semana, y fines de semana con niveles de ocupación de 86% promedio”, comentó a la diaria el director de Turismo de la Intendencia de Rocha, Federico Zerbino.

Los balnearios rochenses con mejor desempeño fueron Punta del Diablo y La Paloma, con promedios de ocupación cercanos a 65%, mientras que en la vereda de enfrente, la Barra del Chuy fue de los más perjudicados por la ausencia de brasileños, con una ocupación de apenas 10% entre semana. Zerbino señaló que, en general, “entre semana no es sostenible para los operadores”. “Es tremendamente cuesta arriba mantener los costos y tener todo funcionando con ese nivel de ocupación”, sostuvo, y afirmó que la tendencia “ya está definida: cuando tenés 70% de ocupación el fin de semana vas a tener menos de 35% entre semana”. Por otra parte, el jerarca indicó que el nivel de las tarifas “es mucho más bajo, porque la utilidad que pueden tener los alojamientos turísticos es mucho menor, la oferta de alquileres es mucho mayor y los restaurantes tienen que estar más competitivos”, lo cual genera menores ingresos para el sector. “Hoy se come en la costa de Rocha, frente al mar, más barato que en un boliche en Montevideo”, aseveró.

La propuesta de los trabajadores

La delegación de trabajadores en el Consejo Sectorial Tripartito de Turismo presentó este mes ante el consejo una batería de medidas para paliar las consecuencias de la “peor temporada que se ha vivido”, tal como dijo a la diaria Jorge González, presidente del Sindicato Único Gastronómico y Hotelero del Uruguay (SUGHU). Según González, en el sector turístico hay “25.000 trabajadores en el seguro de paro y otros que ya salieron del seguro y quedaron sin trabajo”. “El país no está preparado para el turismo interno; hace años que vivimos del turismo de afuera, que tiene mucho más movimiento de plata. El turista nuestro gana un salario normal y no te gasta lo mismo que un extranjero. El nuestro te sale con la cervecita en la congeladora, con algún refuercito, y de diez días que está afuera -ahora eso no está sucediendo- te sale uno o dos a comer. Es la que hacemos todos los laburantes”, describió González.

En ese sentido, los sindicatos del PIT-CNT vinculados al turismo pusieron a consideración de la tripartita una propuesta que incluye continuar con las prórrogas del seguro de paro todo el año y ajustar los montos por el índice de precios del consumo para que no se pierda poder de compra; un complemento salarial para los trabajadores que vieron reducidos sus ingresos por debajo de un salario mínimo nacional (SMN); implementar una suerte de seguro de paro para monotributistas del sector, como los guías turísticos; ingreso transitorio de emergencia, equivalente a un SMN, para los trabajadores del sector que perdieron todos sus ingresos; buscar mecanismos para evitar despidos en empresas que siguen funcionando, y la creación de una bolsa de trabajo en los distintos subsectores de la actividad.

Monitor turístico

La Cámara Uruguaya de Turismo viene publicando un “monitor turístico” donde compara números actualizados semanalmente respecto de 2020 y 2019. En el último informe, que abarca datos que van desde el 11 al 17 de enero, algunos de los números fueron los siguientes:

  • La movilidad en Tres Cruces bajó 26% entre el 1° y el 17 de enero respecto del mismo período de 2020.
  • La Asociación de Arrendadores de Autos informó que la facturación de enero viene siendo 80% menor que la del mismo período del año pasado.
  • Las ocupaciones en los hoteles en esos días fueron 59% en Piriápolis, 49% en las termas, 26% en Colonia y 18% en Montevideo.
  • En los primeros 15 días de enero los hoteles de Punta del Este facturaron en promedio 22% de lo que habían hecho en 2020. En Rocha la ocupación hotelera en esos días fue de 32%.