Luego de más de seis horas de negociación en el quinto piso de la Intendencia de Maldonado, el intendente de Maldonado, Enrique Antía, y delegados de la Agrupación de Guardavidas de Maldonado (AGM) acordaron retomar gradualmente el servicio en las playas a partir del 19 de enero y que no se apliquen sanciones económicas o disciplinarias por la medida del paro.

Desde las 11.00 de este martes más de 100 guardavidas se concentraron en la explanada de la intendencia. Fue el segundo día de paro, una medida que la brigada de guardavidas no empleaba hace más de una década, y que decidió aplicar en reclamo por mejoras en las condiciones de trabajo luego de que dos funcionarios resultaron lesionados tras el derrumbe de una caseta en Balneario Buenos Aires durante el temporal del sábado.

Entre las lluvias intermitentes y con mensajes reivindicativos como “con la vida no se juega, basta de improvisar con los guardavidas”, el gremio de guardavidas esperó la resolución de la reunión en la que, además del intendente y los delegados de la AGM, participaron el director general de Administración y Recursos Humanos, Miguel Abella, el prosecretario general, Álvaro Villegas, el presidente de la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (Adeom), Marcelo López, y el secretario general del sindicato, Carlos García.

El delegado de la AGM Alejandro Bianchi informó, en rueda de prensa, que este martes una cuadrilla integrada por arquitectos y funcionarios de la intendencia recorrió las playas de Maldonado para hacer un relevamiento sobre el estado de las casetas. En las próximas horas los profesionales deberán notificar al gremio sobre aquellas torres que están en “condiciones de ser habitadas”. Se estima que los guardavidas retomarán el servicio en 80% de las playas.

Bianchi también indicó que se conformará una comisión para elaborar un protocolo de “levantamiento de servicio ante inclemencias climáticas, en tanto las torres no se reparen en su totalidad a nivel estructural”. La comisión estará integrada por dos arquitectos o ingenieros designados por la Dirección de Obras y Talleres y dos integrantes de AGM-Adeom.

“La intendencia se comprometió a asignar dos profesionales, arquitectos o ingenieros para el estudio de la parte estructural de las casetas y asegurarnos que soporten los vientos normales, que tiene que soportar una estructura en primera línea de mar. De momento vamos a ocupar [las casetas], en tanto nos brinden la seguridad mínima, pero estamos aguardando el estudio que van a hacer los arquitectos”.

Por otra parte, el intendente aceptó el pedido del gremio de remover de su rol como encargado de los guardavidas al arquitecto y director de obras civiles, Mauricio Tejera. Según señaló el delegado de la AGM a la diaria, los guardavidas no participaron en el diseño de las casetas, cuyo valor asciende a 14.000 dólares, sino que lo hicieron cargos de confianza del intendente.

Sobre las declaraciones que hizo Antía a la prensa, en las que calificó a los guardavidas de “irresponsables” por la medida del paro, Bianchi expresó: “El guardavida es vocacional por naturaleza, en contra de lo que decía el señor intendente: que fuimos muy irresponsables. Creo que la irresponsabilidad fue de la administración [...] Hay que cuidar a los cuidadores, si nosotros no tenemos las mínimas garantías de seguridad, no podemos cuidar a nadie”.

No obstante, resaltó el compromiso “que no había tenido hasta ahora” la intendencia y que este martes demostró el intendente cuando aceptó hacer las reparaciones que requieren las construcciones y mantener el convenio firmado.

Sobre las 17.00 descendió de su oficina el secretario general, Luis Eduardo Pereira, quien, en representación de la intendencia, aseguró que se repararán las casetas dañadas por el temporal en un plazo máximo de 72 horas. “Ante la firma del presente acuerdo que celebramos, queremos decir que esta es la forma de dirimir las diferencias: con ponderación, con respeto y manteniendo siempre la palabra empeñada previamente. Esta es, fue y será la forma de proceder de esta administración”, leyó el jerarca.

Por su parte, el secretario general de Adeom, Carlos García, destacó que la denuncia del sindicato no se debe a “hechos aislados”, sino que desde hace tiempo la AGM planteó la necesidad de refaccionar las casetas.

“Este documento [el acuerdo], en definitiva, termina ratificando que se equivocaron, que echaron para atrás, que entendieron que no había otra que acordar con los trabajadores para garantizar el mejor servicio a la población. Y ese mejor servicio se da garantizando las mejores condiciones, aquellas que prometieron y que no cumplieron”.