En la tarde del 1º de mayo, Víctor Marcelo Acosta Cabral, de 52 años de edad, fue encontrado por la policía en el interior de su domicilio ubicado en el fernandino barrio Sarubbi. Pedía auxilio tras haber recibido múltiples balazos. Más tarde falleció en un centro de salud.

Tras la investigación de varias reparticiones de la Jefatura Departamental de Policía, incluidas entrevistas en el lugar y análisis de imágenes del Centro de Comando Unificado, fueron identificados y localizados los atacantes, cuatro hombres que dispararon desde dos motos.

Continuando con la investigación, el pasado 12 de mayo personal de Homicidios ingresó a una casa del barrio Lavalleja. Allí encontraron dos pistolas marca Glock 9mm, una de ellas con la numeración suprimida, conteniendo un cargador con catorce cartuchos. Esa pistola se encontraba requerida. La otra solo contaba con su cargador, sin munición. Ambas fueron incautadas junto a un teléfono celular.

Dos días después, el Juez letrado de 4° turno de Maldonado ordenó un allanamiento con apoyo del Grupo de Reserva Táctica (GRT) en un fraccionamiento ubicado al norte de la capital departamental, donde fueron detenidos tres hombres: uno de 20 años sin antecedentes penales, y los otros de 22 y 28, respectivamente, con antecedentes.

Paralelamente, los investigadores incautaron 804 gramos de sustancia vegetal, varios celulares, una pistola marca Mauser con su cargador y cuatro municiones, una balanza digital, 14.750 pesos y ropas varias.

El jueves los tres detenidos tuvieron una audiencia judicial en la que resultaron condenados. El hombre de 28 años, identificado como Felipe Rodrigues Fonseca, fue imputado por homicidio, porte de arma por reincidente y tráfico interno de armas de fuego y municiones.

También por porte de armas “con signos de identificación eliminados y cuyas características fueron alteradas para aumentar su capacidad de daño” y un delito de receptación agravado. Todos los delitos fueron en régimen de reiteración real entre sí, por lo cual Fonseca cumplirá una pena de diez años de penitenciaría.

Agustín Rodríguez de los Santos, de 22 años, fue condenado a ocho años y seis meses de penitenciaría como autor de un delito de homicidio. En tanto, el más joven de los tres cumplirá dos años y un mes de cárcel como autor de un delito de tráfico interno de armas de fuego y municiones, en régimen de reiteración real, con un delito de suministro de sustancias estupefacientes.

En la tarde de este viernes, estaba pendiente el fallo sobre un cuarto hombre que permanecía detenido como responsable del mismo homicidio. Las armas y las municiones, y el dinero incautado fueron remitidos a la Junta Nacional de Drogas; la sustancia vegetal será analizada en el Instituto Técnico Forense (ITF) para su posterior destrucción, informó la Jefatura de Policía.