El empresario mexicano-estadounidense Roque de la Fuente propuso nuevamente ante la Intendencia de Maldonado (IDM) colocar La puerta de Punta del Este, del artista Juan Albini, pese a que la iniciativa quedó trunca en 2016 debido al rechazo de los habitantes del balneario. Su intención sigue siendo instalar la obra de hierro en la vereda del edificio El Torreón –del que es propietario junto con incontables inmuebles en la península–, sobre la rambla Claudio Williman y frente a la Liga de Fomento y Turismo de Punta del Este.
La IDM envió un expediente a la Junta Departamental y se está a la espera de la definición de la Comisión de Nomenclatura, con lo cual se reactivó la lucha de los pobladores que rechazan esta obra. En principio, porque en 2016 llegaron a recolectar 2.000 firmas en contra del proyecto y contaron con el aval del intendente Enrique Antía para suspenderlo. Entendían que era un tema laudado, pero la pesadilla regresó.
Ahora la IDM sostiene que la obra “embellecerá y fortalecerá el patrimonio cultural de la ciudad”. La directora general de Urbanismo de la IDM, Soledad Laguarda, y el director general de Cultura de la IDM, Jorge Céspedes, se expidieron a favor de que el intendente presentara el proyecto para la aprobación del legislativo departamental.
Diego Rubio, integrante del grupo de vecinos de Punta del Este, entiende que el proyecto restaría 14 plazas de estacionamiento en la Liga de Fomento y Turismo de Punta del Este. Pero “lo grave es que se pondrán sendas peatonales absolutamente innecesarias” y que se pretende instalar la puerta en un área “definida como receptora de bienes declarados monumentos históricos”, dijo a la diaria.
A modo de ejemplo, Rubio mencionó una escultura de Pablo Atchugarry y el tótem de Julio Tixe en la edificación de la Liga de Fomento y Turismo, que “es el inicio de un recorrido cultural que va desde la calle 32 al Paseo de las Américas”. Los vecinos entienden que se puede “estar violando esta protección” mediante una declaratoria.
Rubio considera que la propuesta debió ingresar primero al Municipio de Punta del Este, “o al menos darle participación, pero no sucedió”. Además, señaló que en el expediente “no hay mención a lo sucedido en 2016” en cuanto a la postura de las y los vecinos de la zona.
“No entendemos por qué en su momento el intendente dijo ‘saber escuchar a Punta del Este’ y hoy le da la espalda al municipio”. Es “como si no tuviéramos voz y voto”, lamentó el vecino.
Carta a los ediles y firmas en change.org
Con el ánimo de desactivar la iniciativa, el grupo de vecinos de Punta del Este envió una carta dirigida a los ediles de la Junta Departamental, que deberán decidir si votan o no el proyecto. En el texto, recuerdan la movilización de 2016 y su desenlace.
También expresan que “la escultura no representa ni a la ciudad, ni a sus habitantes, ni a los logros comunitarios que puedan haber existido; tampoco conmemora ningún hecho”. Por el contrario, consideran que afecta los monumentos de patrimonio cultural y que “ni siquiera tiene una declaración de interés real”.
Rubio dijo que “votar a favor sería votar en forma contraria a la voluntad del pueblo de Punta del Este” y que en caso de que se apruebe este proyecto, buscarán la forma de revocarlo.
Por el momento, están juntando firmas a través de change.org, aunque consideran que las adhesiones recolectadas y enviadas a la Junta Departamental en 2016 son suficientes. A la campaña de ese año sumaron comentarios en contra de la colocación de esta puerta, la declaración de los bienes patrimoniales o monumentos históricos nacionales y una nota que brindó Antía en su momento sobre la escucha a vecinos, así como también integrantes del Municipio de Punta del Este y la Liga de Fomento y Turismo.