Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) respondieron formalmente por medio de cartas a las demandas de Rusia de que la OTAN retire las fuerzas del este de Europa y prohíba a Ucrania unirse a la alianza, en medio de la escalada de tensiones militares en la región.
La diplomacia rusa insistió durante semanas para que Estados Unidos proporcionara respuestas por escrito a las demandas del Kremlin antes de decidir sus próximos pasos, al tiempo que reiteró en numerosas ocasiones que no tenía planes de invadir Ucrania.
Según informó The New York Times, el encargado de entregar el documento fue el embajador estadounidense en Moscú, John Sullivan, quien lo llevó personalmente al Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, donde fue recibido por el viceministro, Alexandr Grushkó.
Paralelamente, el secretario general de la OTAN, el noruego Jens Stoltenberg, dijo que la alianza que preside también le envió una respuesta escrita a las autoridades rusas.
El diplomático nórdico expresó en una conferencia de prensa que la propuesta presentada al Kremlin fue “negociada y acordada” por los 30 aliados. Además, Stoltenberg, insistió en que la OTAN está lista para tratar con Moscú la reducción de armas nucleares, el control de misiles de corto y medio alcance y una mayor transparencia sobre maniobras militares. El secretario general de la OTAN destacó que ahora la marcha de este proceso de conversaciones “depende de si hay voluntad de comprometerse de buena fe y tratar de sentarse y encontrar un terreno común”.
También habló con los medios el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. En Washington, el jefe diplomático de la administración que encabeza el presidente Joe Biden dijo que la respuesta de Estados Unidos a Moscú “establece un camino diplomático serio si Rusia lo elige”. Blinken dijo también que espera hablar en los próximos días con su homólogo ruso, Sergei Lavrov, una vez que los funcionarios rusos hayan leído la respuesta estadounidense y estén “listos para discutir los próximos pasos”.
El documento sugiere “medidas de transparencia recíproca con respecto a la postura de la fuerza en Ucrania, así como medidas para aumentar la confianza”, dijo el funcionario.
La administración Biden ya formuló estas propuestas, por lo que no está claro si la respuesta formal presentada en Rusia tenga algún efecto en la creciente crisis por la acumulación masiva de tropas rusas a lo largo de las fronteras de Ucrania.
Blinken dijo también que Estados Unidos no se había movido de su negativa a contemplar descartar la posibilidad de una futura integración de Ucrania a la OTAN, como exigió el presidente ruso Vladimir Putin, aunque Biden y otros funcionarios estadounidenses dijeron que es poco probable que Ucrania pueda unirse en el corto plazo.