Luiz Inácio Lula da Silva, quien asumirá la presidencia el 1º de enero, confirmó este martes durante una conferencia de prensa en Brasilia que el exministro Aloizio Mercadante estará al frente del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), una de las entidades bancarias públicas más importantes del país.
“Quiero decirles que no es un rumor. Aloizio Mercadante será presidente del BNDES. Necesitamos a alguien que piense en desarrollo, reindustrialización, innovación tecnológica, financiamiento para las pequeñas y medianas empresas. Nuestras empresas públicas no están en venta. Nuestro país será respetado”, dijo Lula, según informó el portal Brasil 247.
Durante su contacto con los medios, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) también les mandó un mensaje a los operadores del mercado financiero. “Al mercado le quiero decir, dígame si en algún momento el mercado hizo tanto dinero como en mi gobierno. Demostramos que es posible gobernar para todos. El crecimiento del PIB sólo tiene sentido si distribuimos el crecimiento con los que produjeron crecimiento, que es el pueblo trabajador”, afirmó Lula.
También el martes se confirmó que la cantante bahiana Margareth Menezes aceptó la invitación del futuro mandatario para ser la próxima ministra de Cultura.
“El presidente Lula dijo que quiere construir un Ministerio de Cultura fuerte para atender los deseos de la gente de la cultura, de la gente de Brasil, por el potencial que tenemos, la riqueza nuestra”, expresó Menezes en la sede del Gabinete de Transición al confirmar que se hará cargo del Ministerio, informó el portal Metropoles.
Menezes, nacida en Salvador de Bahía hace 60 años, es una de las intérpretes más conocidas de samba-reggae, el ritmo surgido en los bloques afrobahianos que luego se convirtió en la base de la música axé, emblemática de esta ciudad brasileña.
Órdenes a las Fuerzas Armadas y vandalismo en Brasilia
El diario Estado de San Pablo informó que una de las primeras órdenes que dará Lula luego de su asunción a las Fuerzas Armadas será el desmantelamiento de los campamentos que seguidores del presidente Jair Bolsonaro tienen frente a varios cuarteles del país.
La orden, de acuerdo con lo que informó el diario paulista, será transmitida en la primera conversación que Lula tendrá con los nuevos mandos militares, cuyos nombres aún no fueron confirmados.
La decisión de ordenar el cese de las protestas golpistas ya había sido tomada incluso antes de los graves incidentes que se produjeron el lunes de noche en Brasilia, protagonizados por militantes bolsonaristas.
Según informó el portal Brasil de Fato, el estallido de violencia comenzó luego de que detuvieran al jefe indígena Tsererê Xavante, uno de los líderes de las protestas golpistas en la capital brasileña, cuyo arresto había sido ordenado por la Policía Federal y el Supremo Tribunal Federal (STF), a pedido de la Fiscalía General de la República (PGR), precisamente por promover actos antidemocráticos.
Los hechos violentos, registrados en videos que se viralizaron en las redes sociales, mostraron a grupos de personas prendiendo fuego varios ómnibus y autos particulares. Además, horas más tarde los militantes bolsonaristas destrozaron una comisaría de Brasilia y otros lugares públicos. Pese a la notoriedad y violencia de las acciones, la Secretaría de Seguridad Pública de Brasilia no informó de ninguna detención, aunque la Policía está investigando, basándose en los videos que registraron los hechos y también en cámaras de seguridad ubicadas en varias partes de la ciudad. Recién este martes el gobernador del Distrito Federal, Ibaneis Rocha, integrante del centroderechista Movimiento Democrático Brasileño, dijo que la situación en la ciudad se había normalizado por completo, ya que en las primeras horas del día los servicios de transporte público no funcionaron en varias zonas de Brasilia.
Pero como era de esperar, los hechos violentos pusieron nuevamente en el foco al presidente Bolsonaro, que fue acusado de promover estas acciones. En ese sentido, el diputado federal por Minas Gerais y líder del PT en la Cámara, Reginaldo Lopes, dijo que el mandatario ultraderechista dio “luz verde” para que sus simpatizantes promuevan los actos perpetrados en la noche del lunes. En un video publicado en su cuenta de Instagram, el legislador pidió que Bolsonaro y los extremistas que lo siguen rindan cuentas ante la Justicia por sus actos.
“Bolsonaro es un irresponsable autoritario y debe rendir cuentas junto con estos radicales por varios crímenes que están cometiendo aquí en Brasilia, y que parece que sucederán en otras ciudades de Brasil”, manifestó Lopes.