La decisión de la Corte Constitucional de Colombia de despenalizar la interrupción del embarazo hasta las 24 semanas de gestación fue criticada por el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que la utilizó para confrontar con sus rivales políticos en año electoral. “En Brasil, la izquierda festeja y aplaude la despenalización del aborto hasta el sexto mes de gestación, lamentablemente aprobada en Colombia”, dijo el presidente en su cuenta de Twitter.

“Que Dios vele por las vidas inocentes de niños colombianos, ahora sujetas a ser segadas con la anuencia del Estado en el vientre de sus madres [...] sin la menor posibilidad de defensa. En lo que de mí depende, lucharé hasta el fin para proteger la vida de nuestros niños”, continuó Bolsonaro, que se postulará a la reelección en octubre y apuesta al apoyo del voto evangélico.

El presidente cuestionó que la dirigente comunista Manuela D’Ávila, excompañera de formula del candidato presidencial de Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), diera la bienvenida a la decisión de la corte colombiana. “La vice de la fórmula petista a la presidencia en 2018 celebra la liberación del asesinato de bebés hasta el sexto mes de gestación”, publicó junto a la foto de D’Ávila. “Fue eso lo que el pueblo rechazó en las urnas en 2018 y lo que va a juzgar con el voto en 2022”, afirmó el presidente.

En Brasil, el aborto sólo se permite en caso de riesgo de vida de la mujer, cuando es consecuencia de una violación y en casos de anencefalia. En Colombia la norma era similar hasta el fallo de la Corte Constitucional del lunes, que mantiene el delito de aborto, pero despenaliza la interrupción del embarazo dentro de los plazos establecidos.

Según la agencia de noticias Télam, Bolsonaro adjudicó el fallo colombiano al “activismo judicial”. El mandatario ultraderechista advirtió además que “el próximo presidente [de Brasil] deberá designar otros dos jueces de la corte [del Supremo Tribunal Federal]”, y por eso la elección de octubre “no decidirá sólo el rumbo en los próximos cuatro años, sino el de las próximas tres décadas”.

Así como derivó sus críticas hacia la oposición, el presidente también aprovechó una conferencia que dio ante un grupo de inversores, el miércoles, para advertirles que, si gana las elecciones su principal rival, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, equivaldría a “caer en el abismo”, sería “una ida sin retorno”. Según informó Efe, también allí se refirió a la composición del Supremo Tribunal Federal y a que el próximo presidente podrá proponer a dos candidatos para integrarlo. También durante su intervención les preguntó a los inversores, con ironía, si les gustaría que su gobierno se acercara a Cuba o a Venezuela.

Mientras Bolsonaro pone la mira en las elecciones y en el líder del PT, Lula se mantiene con amplia ventaja en las encuestas. Uno de estos estudios, el de la Confederación Nacional del Transporte, realizado por la firma MDA y difundido el lunes, le atribuía 42,2% de intención de voto frente a 28% de Bolsonaro. Números similares reiteran distintos sondeos.

El de MDA coloca en tercer lugar en las preferencias de los votantes al dirigente laborista Ciro Gomes, con 6,7%, seguido por el exjuez Sérgio Moro, con 6,4%. Los demás candidatos no superan el 2% de apoyo, y los indecisos rondan el 6%.

La ventaja de Lula, sin embargo, no le evita tener que competir en una segunda vuelta electoral. De acuerdo con el sondeo, en esa votación Lula vencería a Bolsonaro 53,2% a 35,3%.