En un acto celebrado en La Paz en el marco de la conmemoración de los 70 años de la fundación de la Central Obrera Boliviana (COB), el presidente Luis Arce durante su discurso aprovechó la oportunidad para lanzar una crítica a la “derecha reaccionaria” que, en su opinión, busca dividir al pueblo. “Tenemos que entender que las amenazas aún están presentes y para ello debemos fortalecernos, lograr la unidad y estar alertas. No debemos bajar la guardia porque esto sería un grave error, ya que los enemigos de Bolivia están buscando dividir nuestras organizaciones”, manifestó Arce, quien junto al vicepresidente David Choquehuanca fue reconocido con una medalla de distinción por la organización sindical, informó el diario Página Siete.

Según el jefe de Estado, si se lograra el debilitamiento de las organizaciones también se debilitaría “uno de los principales actores de la defensa de la verdadera democracia y de los recursos naturales”. Por lo tanto, “la COB, que fue vanguardia en la recuperación de la democracia a fines de los años 70, principios de los años 80 y que fue decisiva para recuperar la democracia en 2020, debe estar alerta y atenta para responder con firmeza a cualquier plan de desestabilización de la derecha”, remarcó Arce.

El mandatario integrante del Movimiento al Socialismo (MAS) dijo que el país está en un “momento decisivo e histórico” de la reconstrucción económica y del camino del bienestar para los pueblos, por lo que, en su criterio, tienen por delante “el gran desafío de cuidar y defender la unidad, la democracia, los recursos naturales y los derechos conquistados con la lucha del pueblo”.

De acuerdo con lo que consignó el diario paceño La Razón, Arce afirmó que “hoy muchas conquistas alcanzadas corren grave riesgo de ser revertidas”. “La derecha reaccionaria no descansa un minuto y continúa con sus planes subversivos, obsesionada con el derrocamiento de toda expresión de un gobierno popular. Hoy, a través de algunos medios que les son funcionales y les sirven de bocina, tratan de mellar la unidad del pueblo boliviano con mentiras e intrigas, buscan dividirnos porque saben que un pueblo dividido es presa fácil de sus afanes golpistas”, señaló.

Pero el mandatario también aseguró que no le tiene miedo a la derecha golpista porque considera que cuenta con el apoyo “firme y revolucionario” de los trabajadores. “Tenemos la absoluta certeza de que llegado el momento, una vez más, nuestra gloriosa COB sabrá ponerse a la altura de la historia y cerrará filas para impedir el golpe fascista, que es la única forma que tiene la derecha de intentar volver al poder, pero la fuerza proletaria es inconmensurable, la conciencia de clase y su estrecha alianza con el movimiento campesino indígena originario [...] derrotará una y mil veces a quienes pretendan restaurar la república discriminatoria de los pueblos”, concluyó.