El Partido de los Trabajadores (PT) y los sectores que lo acompañarán en las elecciones presidenciales de octubre, el Partido Socialista de Brasil (PSB), el Partido Comunista de Brasil, el Partido Verde, el Partido Socialismo y Libertad, Rede y Solidaridad, presentaron este martes un documento denominado “Directrices para el programa de reconstrucción y transformación de Brasil”, en el que están trazadas las principales líneas de un eventual tercer gobierno del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

“Más que nunca, Brasil necesita recuperar la esperanza en la reconstrucción y transformación de un país devastado por un proceso de destrucción que nos ha devuelto al hambre, el desempleo, la inflación, el endeudamiento y el desaliento de las familias; que pone en peligro la democracia y la soberanía nacional, que destruye la inversión pública y de las empresas, y que dilapida el patrimonio natural, profundizando las desigualdades y condenando al país al atraso y al aislamiento internacional”, comienza el texto.

En el acto de presentación del documento estuvieron presentes Lula, su candidato a la vicepresidencia, Geraldo Alckmin, además de representantes de todos los sectores que conforman la alianza que lidera el PT. Cuando hizo uso de la palabra, Lula destacó la experiencia que él y su compañero de fórmula tienen y afirmó que nadie en el país tiene más capacidad que ellos para sacar a Brasil de la situación en la que se encuentra actualmente.

“Vamos a tener cuatro años de gobierno. No tendremos problemas para ejecutar nuestro programa, tampoco tendremos tiempo para filosofar. En el primer mes de gobierno tendremos que reconstruir nuestro pacto federal. Quiero juntar a los 27 gobernadores y saber lo que tienen en cuanto a proyectos de infraestructura para que no perdamos tiempo. Vamos a conseguir el dinero. Primero vamos a ganar las elecciones y enseguida empezaremos a administrar. ¿Quién en este país tiene más autoridad para recuperar este país que Alckmin y yo? Nadie tiene el apoyo de los partidos y movimientos sociales que tenemos nosotros, ni nuestra experiencia gerencial para cuidar asuntos públicos”, manifestó el candidato a la presidencia, quien sigue primero en todas las encuestas e incluso podría ganar en la primera vuelta, el 2 de octubre.

También habló durante el acto el exministro y referente del PT Aloizio Mercadante, quien fue el coordinador del texto presentado. Según informó el portal Brasil 247, Mercadante dijo que el documento era un punto de partida y que están abiertos a recibir “todo tipo de aportes”.

Subrayó además que dentro de las directrices hay seis ejes centrales: la restauración de las condiciones de vida de la población brasileña; la defensa de la igualdad, la democracia, la soberanía y la paz; el desarrollo económico con estabilidad para combatir el hambre; la justicia social e inclusión con derechos, trabajo, ingresos y seguridad alimentaria; los derechos humanos a través de la cultura y del reconocimiento de la diversidad, y la sostenibilidad socioambiental y frente a la crisis climática.

Paralelamente, Mercadente dijo que el combate al hambre será “una prioridad absoluta”. “Esto no puede continuar en Brasil. Y si alguien va a enfrentar eso es el presidente Lula, porque el hambre para él no es una categoría analítica, es una experiencia de vida. Sabe exactamente lo que es llegar al final del día y tener un hijo que no comió o alguien que no lo ha hecho. Tenemos esto como una prioridad absoluta para todo nuestro programa”, expresó.

Por su parte, Alckmin, exgobernador de San Pablo, destacó la elaboración colectiva del programa de gobierno y atacó al presidente Jair Bolsonaro. “Un plan de gobierno democrático no se hace encima de motos y motos de agua”, expresó el candidato a vice, haciendo referencia a los eventos que protagonizan el mandatario y sus seguidores desde el año pasado en varios puntos del país.

El político centroderechista, que tras más de 30 años de militancia en el Partido de la Social Democracia Brasileña se integró al Partido Socialista para conformar la fórmula con Lula, expresó que es necesario construir propuestas “viendo a la gente y hablando”.

“El pueblo necesita comer. Hay una enorme expectativa, una gran esperanza con el avance de esta campaña cívica. No son promesas, son compromisos. El primer compromiso es con los que más lo necesitan, con los que se quedaron sin trabajo, con los que pasan hambre y con los que volvieron a la miseria”, dijo Alckmin.