El juez argentino Federico Villena sobreseyó el martes a 14 de los 19 tripulantes del avión de la empresa venezolana Emtrasur que aterrizó en Buenos Aires el 6 de junio con pasajeros iraníes. Los otros cinco fueron citados a indagatoria y ya comenzaron a declarar.

La Cámara Federal de La Plata había autorizado hace dos semanas que 12 tripulantes pudieran salir del país; en ese fallo, el tribunal dispuso que “todas las diligencias pendientes” debían resolverse en diez días, plazo que vencía el martes.

En la resolución, a la que accedieron varios medios locales, el juez aseguraba que no había pruebas para llamar a indagar a los 14 tripulantes que liberó, pero señaló que había elementos para continuar con la investigación, por lo que convocó para indagar a cinco de ellos. El lunes el juez comenzó las indagatorias de dos venezolanos: Víctor Manuel Pérez y Mario Arraga Urdaneta, ambos bajo la sospecha de irregularidades financieras vinculadas con la carga del avión. Los dos venezolanos negaron las acusaciones y pidieron ser sobreseídos.

También están citados a indagatoria el piloto Gholamreza Ghasemi y otros dos tripulantes iraníes; esas declaraciones estaban previstas para el martes, pero se postergaron.

El presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), querellante de la causa, Jorge Knoblovits, le pidió al juez Villena que cite a declaración indagatoria a estos cinco tripulantes, porque entiende que hay pruebas suficientes para investigarlos por vínculos terroristas.

Según la DAIA, los cinco son sospechosos de haber participado “en una operación comercial lícita con el fin de obtener dinero y/o bienes con la intención de ser utilizados o a sabiendas de que serán utilizados en todo o en parte para financiar a organizaciones consideradas terroristas”.

La DAIA entiende que los dos venezolanos, Arraga Urdaneta y Pérez Gómez, se valieron de sus cargos en Emtrasur para abrir “cuentas bancarias en distintos países y/o conformado empresas vinculadas a la actividad aérea”, y que dos de los tripulantes iraníes, Ghasemi y Abdolbaset Mohammadi, como capitán de vuelo e ingeniero de refuerzo, respectivamente, “serían los nexos” con las Fuerzas Quds y Hizbulá, señaladas como organizaciones terroristas.