La manera en que el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro utilizó su cargo durante la campaña por su reelección, en 2022, le valió dos condenas por abuso de poder que lo inhabilitan a postularse a cargos electivos hasta 2030.
La primera fue emitida el 30 de junio y se debió a que durante su mandato convocó a embajadores de decenas de países a un inusual encuentro en Brasilia para denunciar ante ellos, sin presentar pruebas, supuestas debilidades del sistema electoral que se utiliza en el país.
La segunda condena, aprobada el martes por el Tribunal Superior Electoral por cinco votos contra dos, apunta al uso con fines electorales de los actos del 7 de setiembre, cuando se conmemora el Grito de Ipiranga, la independencia de Brasil. En 2022, cuando esa fecha cayó en plena campaña electoral, Bolsonaro modificó la celebración convirtiéndola en un acto político, según la conclusión a la que llegó la corte.
“El abuso está claro. Hubo un cambio absurdo en el desfile tradicional en Río de Janeiro”, manifestó el presidente del Tribunal Superior Electoral, Alexandre de Moraes, quien señaló que Bolsonaro aprovechó la fecha para promover su candidatura. “Lo que más le convenía a la campaña del candidato a la reelección era un desfile en Copacabana para terminar su gran espectáculo en el Fuerte de Copacabana” y no en el centro de Río de Janeiro, como suele hacerse, afirmó.
“Está demostrado el uso de las propagandas de televisión electorales para convocar al electorado a asistir al Bicentenario de la Independencia el 7 de setiembre, y que esa acción estuvo dirigida a inducir a una confusión entre actos electorales y oficiales”, manifestó el juez Benedito Gonçalves, de acuerdo con lo que informó la revista Carta Capital.
A su vez, André Ramos Tabares, otro de los integrantes del tribunal, dijo que “lo que se nota es que ya desde la concepción, ya al convocar a la población, la fecha conmemorativa estaba dirigida a la campaña electoral de los investigados”.
Ramos Tabares señaló, además, que el acto oficial “fue instrumentalizado, y funcionó como señuelo para eventos electorales declarados, siendo estos los eventos principales, es decir, las concentraciones que se realizaron después”.
La defensa de Bolsonaro argumentó que el entonces candidato no usó la celebración oficial para hacer campaña, sino que se desplazó hasta otro lugar para hacer un acto político ese día.
Sin embargo, el tribunal consideró que ese acto tuvo lugar a sólo 300 metros del desfile oficial, pagado y organizado por el Estado, y que se hizo una “instrumentalización de las Fuerzas Armadas para una candidatura a presidente y vicepresidente de la República”.
La corte dispuso la misma condena para el compañero de fórmula de Bolsonaro, Walter Braga Netto, al igual que el exmandatario, también actualmente integrante del Partido Liberal.
Según informó O Globo, esta condena que recibió Bolsonaro no se suma a la anterior, de modo que dentro de ocho años el expresidente podría ser candidato a un cargo electivo. El diario carioca señaló que la sanción de inelegibilidad se aplica desde el 2 de octubre de 2022, cuando se celebró la primera vuelta electoral, hasta el 2 de octubre de 2030, lo que permitiría al expresidente presentarse a las elecciones de ese año, cuya primera vuelta está prevista para el 6 de octubre.
También Braga Netto queda inhabilitado por ocho años, después de ser acusado de abuso de poder político, uso indebido de los medios de comunicación y conducta prohibida.
El fallo implica también multas para Bolsonaro de hasta 85.000 dólares y para Braga Netto de hasta 42.500.
Las defensas de los dos políticos pueden apelar. Sin embargo, en el caso de Bolsonaro, con dos condenas, debería lograr que se reviertan los dos fallos para evitar los ocho años de inhabilitación.
Además, según informó Carta Capital, está en proceso otra investigación contra el expresidente por un supuesto daño a las arcas públicas causado para llevar adelante la reunión con los embajadores. Esa investigación, que está en manos del Tribunal de Cuentas de la Unión, corre por carriles diferentes y podría ampliar el tiempo de inelegibilidad de Bolsonaro.
En el caso de Braga Netto, su inhabilitación frustra los planes de Valdemar Costa Neto, el presidente del Partido Liberal, que lo quería como candidato a alcalde de Río de Janeiro para las elecciones estaduales del año que viene. También deja por el camino las aspiraciones de Braga Netto de postularse al Senado por Minas Gerais en 2026.
De todas maneras, el Partido Liberal ya anunció que apelará la decisión judicial.