Suecia quedó más cerca de ser aceptado como miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), después de que el martes la comisión de Exteriores del Parlamento turco aprobara un primer aval al protocolo de adhesión del país nórdico al bloque.

Turquía ha estado bloqueando la adhesión de Suecia a la OTAN por más de un año, afirmando que el gobierno de Estocolmo es demasiado indulgente hacia grupos que son considerados por el gobierno turco como amenazas a la seguridad, entre ellos militantes kurdos y miembros de una red que Ankara cree que fue responsable por un intento de golpe de Estado en 2015, según informó Associated Press.

Sin embargo, Suecia “probablemente” no podrá entrar en la OTAN hasta inicios de 2024, según dijeron fuentes parlamentarias a AFP.

El protocolo de adhesión de Suecia debe ser aprobado en la Asamblea General, pero los diputados no volverán a sesionar hasta el 15 de enero.

El sector político del presidente Recep Tayyip Erdoğan, el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, por sus siglas en turco), teóricamente podría convocar a una sesión especial para votar sobre el asunto, pero todo indica que esto no sucederá.

En noviembre, la comisión de Exteriores del Parlamento empezó a tratar la adhesión de Suecia a la OTAN, pero los plazos fueron postergados tras la entrega de una moción de aplazamiento presentada por legisladores del AKP, que afirmaron que faltaban aclaraciones sobre algunos asuntos y que las negociaciones con Suecia no habían “madurado” lo suficiente.

Este mes, Erdoğan dijo que el Parlamento turco no aprobaría la adhesión de Suecia en la OTAN hasta que el Congreso estadounidense aprobara la solicitud de Turquía de comprar aviones de combate F-16.

También pidió que Canadá y otros aliados de la OTAN levantaran los embargos de armas impuestos a Turquía y declaró: “La evolución positiva de Estados Unidos con respecto a la cuestión del F-16 y el cumplimiento por parte de Canadá de sus promesas acelerarán la opinión positiva de nuestro Parlamento sobre [la adhesión de Suecia]”, según informó la agencia de noticias estatal Anadolu.

Según informó The Guardian, la fuerza aérea de Turquía fue expulsada del programa de caza de ataque conjunto F-35 liderado por Estados Unidos desde 2019 como represalia por la adquisición por parte del gobierno turco de un avanzado sistema de defensa antimisiles ruso, lo que la OTAN califica de una amenaza a la seguridad operacional.

Cuando se reanudaron las discusiones, el martes, sobre la adhesión sueca al bloque militar, una gran mayoría de legisladores votó a favor de la solicitud de Suecia.

Antes de que la comisión votara, el viceministro de Asuntos Exteriores, Burak Akçapar, enumeró los pasos que Suecia había dado para cumplir con las demandas de Turquía, entre ellos el levantamiento de restricciones en ventas de la industria de defensa y las enmiendas de leyes antiterroristas.

Explicó: “No es realista esperar que las autoridades suecas cumplan inmediatamente todas nuestras demandas. Este es un proceso, y este proceso requiere esfuerzo coherente y a largo plazo”.

Tobias Billström, el ministro de Exteriores sueco, respondió a la decisión en X: “Celebramos que la comisión de Exteriores del Parlamento en Turquía aprobó la solicitud de Suecia a la OTAN. El próximo paso es que el Parlamento vote sobre el tema”.

El único otro miembro de la OTAN que todavía no ha ratificado la solicitud de Suecia de adhesión a la OTAN es Hungría. En setiembre, el primer ministro de ese país, Viktor Orbán, declaró que “nada” estaba amenazando la seguridad de Suecia y que, por eso, Hungría no tenía “ninguna prisa” para ratificar su adhesión a la OTAN.