El martes Bogotá será la sede de la Conferencia Internacional sobre el Proceso Político en Venezuela, instancia que fue convocada por el presidente colombiano, Gustavo Petro, con la finalidad de que se reanude el proceso de diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición, que está agrupada en una entidad denominada Plataforma Unitaria.

En el encuentro participarán representantes de 19 países, entre los que se incluyen Estados Unidos, Canadá, Colombia y otras naciones de América Latina, además de integrantes de la Unión Europea, pero no estarán ni el gobierno de Venezuela ni los dirigentes de la oposición.

De todas maneras, el gobierno de Petro está en contacto con ambas partes, que esperan con expectativa la instancia de diálogo.

Según informó AFP, el domingo, y como parte de la preparación de la conferencia, el canciller colombiano, Álvaro Leyva, se reunió con Maduro en Caracas. Además, este martes desde la Plataforma Unitaria se comunicó que antes de la realización de la conferencia tendrán un encuentro con Petro.

“El presidente Petro ha invitado a nuestra delegación de negociación de la Plataforma Unitaria a una reunión previa de trabajo”, dijo en un comunicado la delegación, que confirmó su asistencia al encuentro con el mandatario colombiano ante la “indispensable” necesidad de reactivar las negociaciones, que quedaron paralizadas en noviembre del año pasado en México. El diálogo entre el gobierno y la oposición venezolana está trabado desde la última reunión, el 26 de noviembre, a la espera del desembolso de unos 3.000 millones de dólares que están bloqueados en bancos extranjeros. Ese dinero, de acuerdo a lo que acordaron ambas partes, debería ser liberado para promover programas sociales que atiendan las necesidades que están pasando millones de venezolanos.

Según declaró el lunes desde Estados Unidos, donde se encuentra de visita oficial, Petro, que se reunirá el jueves con su homólogo Joe Biden, dijo que la expectativa de la cumbre sobre Venezuela es poner fin a las sanciones económicas que pesan sobre el gobierno de Caracas y que haya “mucha más democracia” en el país. Maduro expresó “todo el apoyo” para que la cita “tenga éxito”, mientras que desde la oposición se espera que la cumbre internacional sirva para la “inmediata” reactivación de las negociaciones por las que espera conseguir condiciones para la celebración de elecciones “libres, observables y verificables, que cumplan con los estándares democráticos”.

Entre las principales exigencias de la Plataforma Unitaria está el levantamiento de inhabilitaciones a posibles candidatos en las elecciones presidenciales que se celebrarán el año que viene, en las que Maduro buscará ser reelecto por segunda vez.

Esta semana el Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano emitió un comunicado en el que remarcó la posición del gobierno para la reactivación de las conversaciones con la oposición.

“La República Bolivariana de Venezuela manifiesta a la comunidad internacional que sólo se podrá avanzar en el diálogo político entre venezolanos una vez que se hayan anulado todas las medidas coercitivas unilaterales aplicadas a nuestro país, las cuales son contrarias al derecho internacional, al derecho internacional humanitario, a la Carta de las Naciones Unidas y a las normas y principios que regulan las relaciones pacíficas entre los estados, tal y como ha sancionado recientemente el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas”, se expresó desde Caracas.