El jueves 18 se realizará en el centro de Buenos Aires una movilización inédita, en la que organizaciones sociales de izquierda y otras cercanas al gobierno se movilizarán de manera unificada reclamando por la situación social que vive el país.
El Ministerio de Desarrollo Social que encabeza Victoria Tolosa Paz será el punto de convergencia de la marcha, que fue anunciada este jueves en una conferencia de prensa en el Obelisco y que tendrá la particularidad de que será la primera vez que todas estas entidades, algunas de ellas con afinidad con el kirchnerismo, se manifestarán de manera monolítica durante el gobierno del Frente de Todos.
De acuerdo a lo que informó elDiarioAR, las agrupaciones sociales, de fuerte referencia territorial en numerosos barrios carenciados de la capital y de los alrededores de la ciudad de Buenos Aires, acordaron comenzar “un plan de lucha” con el reclamo principal de la emergencia alimentaria y contra el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En la conferencia del jueves en el Obelisco estuvieron presentes dirigentes de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Unidad Piquetera, el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y la Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Argentina Autónoma (CTA).
Además, ya manifestaron que dirán presente en la movilización el Movimiento Evita, muy cercano al kirchnerismo y conducido por Emilio Pérsico; el Movimiento de Trabajadores Excluidos, de Juan Grabois, también parte del peronismo; Somos-Barrios de Pie, de Daniel Menéndez, y el trotskista Polo Obrero, que tiene como máximo referente a Eduardo Chiquito Belliboni.
“Estamos en un marco de unidad muy amplia de los movimientos populares. Es la más amplia que he visto y en la que he participado. Nos parece una falta de respeto que no podamos resolver el problema alimentario en nuestras organizaciones y nuestros barrios. Hay una decisión política de que eso no se resuelva y nos obliga a movilizarnos el 18 de mayo hacia Desarrollo Social para empezar un plan de lucha hasta que se resuelva el problema alimentario”, expresó durante el encuentro de las organizaciones el secretario general de la UTEP y dirigente del Movimiento Evita, Esteban Gringo Castro.
“El salario social no alcanza y el salario de quienes están formales no alcanza. Vamos a ver una de las marchas más masivas de los últimos diez o 15 años”, prometió Castro. “Lo que se viene es seguir ajustando, pero sobre la base de 40% de pobreza”, dijo Castro. Por su parte, Omar Giuliani, de la CTA-Autónoma, agregó que “los criminales son el FMI, pero también el gobierno que acepta la cogobernabilidad”. Desde las organizaciones cercanas al oficialismo reconocieron que el hambre que se sufre en los barrios no se aguanta más, consignó La Izquierda Diario.
Luego fue el turno de las organizaciones piqueteras opositoras. Eduardo Belliboni, de Polo Obrero, dijo que “es muy importante esta unidad, estas acciones en común. Debería ser ejemplo para que la clase obrera ocupada ocupe la escena”. El dirigente criticó la gestión de Tolosa Paz al frente del Ministerio de Desarrollo Social y del gobierno de Alberto Fernández en general, y aseguró que “este será el primer paso, necesitamos un paro general y un plan de lucha unificado”. Mientras tanto, Marianella Navarro, del FOL, denunció el hambre que se vive en los barrios y aseguró que “esto es un frente único contra el ajuste y el FMI, porque ese plan es cumplido a rajatabla por el gobierno nacional y Tolosa Paz”.
En la misma línea se manifestó Raúl Godoy, referente del Movimiento de Agrupaciones Clasistas. “Saludamos este importante paso”, expresó, y agregó: “Nos sumamos a la denuncia del brutal ajuste del gobierno que sigue las directivas del FMI. Creemos que es importante avanzar en la unidad de ocupados y desocupados. Para pelear por los reclamos que plantean los compañeros, desde el alimento, la suba en los planes, contra los recortes de la ayuda social; y también por aumento de emergencia para planes, salarios y jubilaciones, por trabajo con derechos para todos y todas, por el no pago de la deuda con el FMI”.