Aunque sabía que no contaba con los votos para ser investido presidente del gobierno español, el líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, se presentó este martes en el Congreso a una primera sesión de investidura, que el miércoles tendrá su segunda jornada.

El dirigente conservador reúne el apoyo de 172 diputados y tiene el voto en contra de 178, por lo que está previsto que quede por debajo de la mayoría simple que necesita para formar gobierno en todas las instancias convocadas para esta semana. De todos modos, la sesión del martes le dio a Núñez Feijóo una tribuna desde la cual criticar al actual gobierno, liderado por Pedro Sánchez, del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

Sánchez podría haberle respondido al dirigente en nombre del gobierno, pero en su lugar designó para ese papel al diputado socialista Óscar Puente. Esta decisión indignó a Núñez Feijóo, que la calificó de “lamentable”.

El PSOE argumentó que será momento de escuchar a Sánchez “cuando llegue el tiempo de su propia investidura”. Por lo tanto, se prevé que el líder del partido no intervendrá en la sesión del miércoles ni tampoco en la del viernes, cuando Núñez Feijóo tendría que obtener más votos a favor que en contra en el Congreso para ser investido.

Sobre Sánchez, el líder del PP manifestó: “Me pedía seis debates en la campaña electoral y ahora no es capaz de hacer el segundo”. En apoyo al dirigente opositor, varios diputados del PP le gritaron “cobarde, cobarde” al jefe de gobierno, y la presidenta del Congreso, la socialista Francina Armengol, les recordó que la cámara “no es un patio de colegio”.

En respuesta, Puente recordó que Núñez Feijóo “eludió acudir a los debates en la campaña electoral porque le entró una lumbalgia”, y agregó con tono irónico: “Este es el valiente”.

El dirigente del PSOE le dijo al candidato conservador que no tuvo éxito como “profeta” al anunciar una “profundísima crisis económica” para el año pasado o “fin” político de Sánchez. “El muerto que usted mata goza de buena salud, señor Feijóo”, dijo Puente. “Vino usted a derogar el sanchismo y acabará siendo usted el derogador derogado, señor Feijóo. Eso es lo que le va a pasar a usted”, agregó, según citó RTVE.

El diputado socialista, que fue alcalde de Valladolid, le reprochó a Núñez Feijóo su insistencia en el argumento de que el PP debe gobernar porque fue el partido más votado en las últimas elecciones. Recordó que también él fue este año el más votado para la alcaldía de Valladolid, pero el cargo quedó en manos de una alianza del PP con Vox. “De ganador a ganador: ¿por qué tiene usted más derecho a ser presidente del gobierno que yo a ser alcalde de Valladolid?”, le preguntó.

“Feijóo, ni usted ni yo hemos ganado las elecciones. A mí no me costó reconocerlo, reconocí mi derrota a pesar de ser el más votado. En una democracia parlamentaria encabezar la lista más votada no es ganar las elecciones, gana quien logra formar gobierno”, dijo Puente. Agregó que el argumento de que debe gobernar la lista más votada es “anticonstitucional”.

Por su parte, Núñez Feijóo repasó en su discurso las medidas incluidas en su programa de gobierno, pero también dedicó tiempo a cuestionar a Sánchez. En particular, criticó la posibilidad de que acuerde con partidos políticos de Cataluña una amnistía para los acusados de impulsar el proceso independentista catalán de 2017. El líder del PP llamó a los socialistas que rechazan ese acuerdo a que apoyen su investidura y propuso crear el delito de “deslealtad constitucional”, aunque no dio detalles sobre esa figura.

Afirmó que si él hubiera pactado una amnistía con los partidos independentistas contaría con los votos para ser investido presidente del gobierno. Pero dijo que no accedió por su “integridad” y porque tiene “principios” y “palabra”, y acusó a Sánchez de tener una “obsesión” por “el poder a toda costa”.

“El proyecto de Sánchez nos lleva a la destrucción”, dijo a su vez el ultraderechista Santiago Abascal, líder de Vox, quien le ofreció a Núñez Feijóo una “colaboración sin remilgos ni complejos” con el objetivo de “recuperar la normalidad democrática” y detener al “separatismo golpista”.

Por su parte, en nombre de Sumar –la coalición de izquierda que lidera la vicepresidenta Yolanda Díaz– habló la portavoz parlamentaria Marta Lois, que acusó a Núñez Feijóo de “vivir del conflicto” en Cataluña y sacar réditos de esa crisis. La dirigente defendió la posibilidad de una amnistía como “una oportunidad de pasar página” y dijo que esa medida no estaría dirigida “a las élites políticas”, sino que abarcaría a “cientos de personas anónimas” que “se vieron envueltas en un conflicto político”.