En una jornada con protestas universitarias en las calles, y con decenas de facultades ocupadas en distintas provincias, la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, acusó a los estudiantes de tener como objetivo “generar una revuelta y desestabilizar” al gobierno de Javier Milei.
Consultada por Radio Mitre, Bullrich hizo referencia a las protestas masivas de 2019 en Chile, y dijo que los estudiantes argentinos buscan seguir el “modelo chileno, cuando rompieron y destruyeron todo”, y consideró que las protestas son en realidad “una provocación que llevan al límite”.
“Quieren hacernos generar un enfrentamiento. No lo van a lograr, porque nosotros tenemos en claro que ellos van a ir con molotovs [a las marchas], con una cantidad de cosas a propósito, para lograr un in crescendo”, dijo. “No vamos a permitirlo porque no somos tontos”, agregó la ministra. Según Bullrich, el gobierno va a “trabajar con la prudencia” de no dejarse “llevar por estos pocos estudiantes que están tomando las universidades”.
“Sabemos qué buscan. Lo que están buscando es algo muy pesado”, dijo. “Ellos tienen en la cabeza el modelo chileno, que fue el descontrol total a partir de un grupo de estudiantes, con revueltas, con muertos”, agregó Bullrich. La ministra se refirió a la reducción de la inflación en su país y acusó a los estudiantes de intentar “destruir lo que está logrando la Argentina, paso a paso y con un enorme sacrificio”.
Otros integrantes del gobierno también hicieron declaraciones sobre las protestas. El propio presidente Javier Milei acusó a los estudiantes de “ocultar los curros de los delincuentes” y les advirtió: “Yo no voy a ceder”.
De acuerdo con el diario Tiempo Argentino, el jefe de gabinete, Guillermo Francos, también se refirió a las movilizaciones y afirmó: “En la década del 70 también se tomaban universidades. Se tomaban universidades y después se generaba un movimiento que utilizaba la violencia para expresar sus posiciones. Se convirtió en guerrilla subversiva y generó después la represión”.
El presidente del Consejo Interuniversitario Nacional y rector de la Universidad Nacional de San Luis, Víctor Moriñigo, advirtió acerca de los “discursos de violencia” emitidos desde el gobierno contra el movimiento estudiantil, según citó Perfil. El rector dijo que “el movimiento estudiantil es pacífico, es revoltoso para pedir cosas pero es pacífico” y “hay que llamar a la cordura porque el discurso presidencial genera cultura en nuestros jóvenes y el tema está escalando a una manera que ojalá no tengamos que lamentar absolutamente nada”.
Por su parte, Luca Bonfante, delegado estudiantil de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, dijo a Radio Rivadavia: “En este momento hay casi 100 facultades tomadas. En esas tomas hubo asambleas, clases públicas y esto va a continuar en los próximos días. [...] Se ha puesto en pie el movimiento estudiantil a nivel nacional y el gobierno tendrá que lidiar con ello”.
Además de las marchas convocadas para el miércoles, las universidades definieron un paro para este jueves y otro, de 48 horas, para la semana próxima.
Trabajadores estatales movilizados
“No nos bancamos más a este gobierno. Tenemos que profundizar el plan de lucha. Los salarios de los estatales ya no alcanzan para garantizar una vida digna. Tenemos que frenar a Milei antes que termine de aniquilar el derecho constitucional a una retribución justa”, dijo Rodolfo Aguiar, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
De acuerdo con Tiempo Argentino, ATE convocó a un paro de 36 horas para el martes 29, desde las 12.00, y a una movilización al Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, a cargo de Federico Sturzenegger.
“Tenemos que seguir en la calle y debemos poner en evidencia a Sturzenegger. Este es un funcionario que durante meses actuó en las sombras y su maldad no tiene límites. Hasta ahora la sacó bastante barata. Nos vamos a movilizar al Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado para rechazar el cierre de organismos y las irregularidades y excesos en la reglamentación de la Ley Bases”, dijo Aguiar.
ATE informó que los salarios que habían sido acordados por el sector quedaron en lo que va del año 34% por debajo de la evolución de los precios, y según su dirigente, “el número de empleados públicos por debajo de la línea de la pobreza es el más alto de las últimas décadas”. A esta situación se agregan despidos de trabajadores y cierres de organismos estatales.