El Ministerio Público venezolano solicitó la emisión de un alerta roja a Interpol contra el opositor Edmundo González Urrutia, opositor del presidente Nicolás Maduro en las disputadas elecciones del 28 de julio.
La Fiscalía solicitó tramitar una “solicitud de alerta roja contra el ciudadano Edmundo González Urrutia”, quien actualmente se encuentra asilado en Madrid, según un documento fechado el 26 de octubre y enviado a Interpol. La solicitud comenzó a circular este jueves en la prensa y en las redes sociales.
El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, confirmó en diálogo con AFP la veracidad del documento, que González Urrutia calificó de “un nuevo y sistemático ataque” contra él. “Está claro que este nuevo y sistemático ataque se debe a nuestro trabajo en el exterior”, afirmó González Urrutia, en un mensaje en X (antes Twitter), acompañado de una copia del documento.
“Estamos llevando el mensaje, sobre el indiscutible triunfo del deseo de cambio de los venezolanos, las violaciones de derechos y las próximas acciones, a todas las instancias decisorias del mundo. La voluntad del pueblo venezolano no sólo es reconocida por todos, sino que también será respetada. Nosotros estamos trabajando para que así sea”, agregó González Urrutia en el texto.
Según se explica en el documento emitido por la Fiscalía venezolana, la solicitud de orden de detención internacional contra González Urrutia es por los delitos de “usurpación de funciones, falsificación de documentos públicos, instigación a la desobediencia a las leyes, asociación para delinquir”, entre otros.
Se trata de los mismos cargos por los que se dictó orden de detención nacional, lo que lo llevó a exiliarse, según él, “bajo coacción”, en España el 8 de setiembre. La defensa del candidato de la Plataforma de Unidad Democrática esperaba que el caso se cerrara.
González Urrutia reivindica la victoria en las elecciones presidenciales de julio, en las que la autoridad electoral declaró ganador a Maduro para un tercer sexenio (2025-2031), pero sin mostrar los detalles del conteo.
Desde la comunidad internacional se exigieron los documentos electorales que avalaran la proclamación del líder chavista como vencedor, pero estos nunca fueron revelados, lo que no hizo más que aumentar las sospechas de que los comicios efectivamente fueron fraudulentos.
El Ministerio Público venezolano también abrió una investigación contra la líder opositora María Corina Machado, quien pasó a la clandestinidad poco después de denunciar fraude en las elecciones. A ella se la acusa de “falsificar” las actas de votación que su equipo publicó en un sitio web y que, según afirman, son prueba de la victoria del bloque opositor en las elecciones.