Horas después del inicio del cese del fuego entre los gobiernos de Irán e Israel, anunciado por el presidente estadounidense, Donald Trump, en la noche del lunes, el ejército israelí afirmó haber detectado misiles lanzados desde Irán y ordenó responder con “fuerza”.
Irán negó haber lanzado misiles contra Israel y acusó a las fuerzas israelíes de haber continuado con los ataques una hora y media después de iniciado el alto el fuego. Según el ejército iraní, la última ola de misiles que lanzó contra Israel fue minutos antes del inicio del alto el fuego.
Trump, en una rueda de prensa antes de partir de la Casa Blanca rumbo a la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte en La Haya, aseguró que ambos países habían roto la tregua y expresó que no estaba “feliz” con la situación. Aunque acusó a las dos partes, señaló especialmente a Israel por responder con fuerza contra Irán “porque se sintió violado por un cohete que no cayó en ninguna parte”, afirmó.
“No estoy contento con ellos. Tampoco estoy contento con Irán, pero realmente estoy descontento con que Israel haya salido esta mañana”, dijo Trump. “Básicamente tenemos dos países que han estado peleando tanto tiempo y tan duro que no saben qué mierda están haciendo”, aseveró el presidente estadounidense.
“Tengo que hacer que Israel se calme ahora”, declaró Trump antes de abandonar la Casa Blanca. Poco después, publicó un mensaje dirigido a Israel en su red Truth Social: “Israel. No dejes caer esas bombas. Si lo haces, es una gran violación. ¡Trae a tus pilotos a casa, ahora!”.
Los medios israelíes informaron que Trump llamó al primer ministro Benjamin Netanyahu. Según informó The New York Times con fuentes de la Casa Blanca, Trump habría llamado a Netanyahu desde el avión presidencial y fue “firme y directo” con el primer ministro israelí. “El primer ministro entendió la gravedad de la situación y las preocupaciones expresadas por el presidente Trump”, dijo el funcionario al medio estadounidense.
En otro mensaje en Truth Social, Trump aseguró que Israel no atacará a Irán y que sus aviones “se darán la vuelta y se dirigirán a casa”: “Nadie será herido, ¡el alto el fuego está en vigor!”, afirmó.
La oficina del primer ministro israelí aseguró que destruyó una instalación de radar cerca de Teherán en respuesta a la violación de la tregua por parte de Irán, pero se abstuvo de lanzar nuevos ataques tras la conversación entre Netanyahu y Trump.