Cuando el Talibán tomó el poder en Afganistán, el 15 de agosto, miles de personas comenzaron a huir del país en busca de seguridad. Muchas tratan de llegar a Irán y de allí a Turquía. El fotógrafo Alessio Paduano estuvo en Van, una pequeña ciudad del este del territorio turco que ha sido el destino de muchos de esos migrantes afganos, y cuenta que con frecuencia son llevados hasta allí por traficantes a los que les pagan unos 1.000 dólares por esa travesía agotadora.