“La audiencia que acompaña hoy: muchos muchachos. ¿Dónde están las chicas? Una, dos, tres... ¿La cuota de género dónde está?”, preguntó la presentadora del evento en la noche del miércoles en la sede del Partido Colorado (PC). “No me lo preguntes a mí, no soy el que tiene que responder”, dijo el diputado colorado Gustavo Zubía antes de que empezara el acto de lanzamiento de La Libertad Avanza, una de las listas que participarán en las elecciones juveniles coloradas del 5 de noviembre. La lista tiene en el primer lugar para la Convención Nacional del PC a Bautista Gil Castillo, nieto del oncólogo, pediatra y dirigente colorado Luis Alberto Ney Castillo.

Gil suele tener mucha actividad en Twitter, donde se muestra admirador del argentino Javier Milei y critica al sector colorado Ciudadanos, al que nombra “Zurdadanos”. Antes de que empezara el evento, Gil colgó en el atril la que se conoce como Bandera de Gadsden, que ostenta una serpiente, dice “Don’t tread on me” (“No me pises”) y es un símbolo del liberalismo más antiestatista. Cuando terminó de llegar la audiencia –unas 30 personas–, Gil repartió números para un sorteo que tenía como premios máximos una botella de whisky rojo de la marca del señor caminante y un libro sobre Jorge Batlle, escrito por el exdiputado colorado Washington Abdala.

Luego sonó el tango “Por una cabeza”, a pedido de Zubía, y el diputado dijo que el balotaje de 2019 la coalición lo ganó “por una cabeza”, así como el referéndum contra la ley de urgente consideración del 27 de marzo. “¿Cuál era mi deseo político? Que no hubiese sido por una cabeza”, dijo el diputado. Por lo tanto, a su juicio, hay que “afirmar, para no seguir ganando por un escaso margen”.

“Para mí es nuevo este formato, tipo happening, que abrimos la reunión con esta fluidez y juventud de la presentadora”, dijo Zubía, luego de que se rifó el whisky. El diputado volvió a insistir con los temas sobre los que habla hace tiempo, como la Fiscalía General de la Nación y cómo “se ha venido deteriorando la imagen” de ese organismo. Subrayó que le pasa “factura” al presidente Luis Lacalle Pou porque “la coalición no ha dado muestras de morder con la intensidad que tendría que morder en algunos temas”.

“Todavía estamos con modos demasiado educados para enfrentar problemas graves, que nos pueden ocasionar un cierto desprestigio. En el caso de la Fiscalía, el tema central es que el cargo de fiscal de Corte sigue estando vacío, hay un fiscal interino [Juan Gómez], y todos escuchamos los graves problemas que enfrentamos, como la falta de operatividad de los fiscales en la lucha contra el delito”, sostuvo. Agregó que en poco tiempo se llegará “al año de acefalía” en ese organismo y “el presidente no ha llenado el cargo como tendría que llenar”.

Estatismo, “ideología de género” y Astesiano

Zubía dijo que quería hacer “el paralelismo con Bauti”, porque “en muchas cosas, él se manifiesta también en oposición” al gobierno, “incluso con otras corrientes internas del partido”. Sostuvo que “es lógico, loable, valiente y hay que hacerlo”, porque “ser coalición no significa ser pichicho de los mandados”, sino decir “te seguimos, tenemos que luchar contra las fuerzas con las que estamos más separadas, que son las del Frente Amplio, pero diciéndole a quien está conduciendo el barco” que “acá te estás equivocando, estás siendo omiso”. “Sigo la línea del presidente, estoy en la coalición, pero critico cuando no se hacen cosas. Ese me parece un perfil mucho más sano para el sistema político”, insistió. Agregó que “la pila del aparatito de escuchar no siempre funciona” en la coalición “y hay mucha gente desconforme con muchas cosas, que lamentablemente no está siendo escuchada”.

El evento lo cerró Gil, quien subrayó que Tercera Vía –el grupo liderado por Zubía– es el sector con el que más se identifica del PC, con el que tiene “muchas cosas en común y algunas diferencias”, pero subrayó que discrepar es parte del asunto, porque si no “estamos en Cuba o Venezuela, donde no se discrepa”. “Hoy por hoy, el estatismo nos impregna, hay estatismo por todos lados, hasta en la sopa. Los partidos tradicionales no han sido ajenos a esta tendencia, mediante la cual pareciera que le estamos rindiendo culto a un dios”, sostuvo Gil. Agregó que el resultado de eso es “gente que no llega a fin de mes” y “servicios ineficientes”, porque “conocemos bien que el Estado es ineficiente, pero los zurdos todavía no lo han detectado”.

Más adelante, criticó a la “ideología de género”, que es “nefasta; lo único que viene a hacer es revictimizar a la mujer y no viene a solucionar nada”. “La ideología de género es el nombre que se le dio en el siglo XXI a la lucha de clases, porque se cayó el Muro de Berlín y hubo que inventar algo para seguir currando; y hoy este gobierno lo financia, y tiene que dejar de financiarlo”, acusó.

Al final, una señora mayor, que estaba entre los presentes, dijo que le encantaría participar en las elecciones de jóvenes, pero no puede porque es para personas de entre 14 a 30 años. “Es fácil; hable con [Alejandro] Astesiano, que le hace la cédula para que pueda votar”, le dijo Zubía, y se zambulló en un mar de aplausos y risas.