Mediante un decreto fechado el 13 de diciembre, el Poder Ejecutivo resolvió reglamentar el artículo 774 de la Ley de presupuesto de 2020. Dicho artículo establece que deberá destinarse al menos 20% del monto total de la publicidad oficial de alcance nacional a “medios de comunicación, programas o producciones informativas o periodísticas comerciales o comunitarios, con realización y producción propias y radicados en localidades del interior”.

En el decreto el gobierno admite que no cuenta con estudios regulares sobre la audiencia de los medios en el interior del país, y señala que para asignar la publicidad tomó en cuenta la cantidad de medios en cada modalidad, la frecuencia de publicación, el alcance, los costos de producción de contenidos y los costos publicitarios.

Con base en estos factores, distribuye la publicidad de la siguiente manera: a cada departamento del interior le corresponderá 0,5% del monto total. El 91% restante se repartirá de la siguiente forma: 40% para señales de televisión abierta y señal propia de TV para abonados que produzcan contenido en la localidad, 40% para radio AM o FM comercial, 19% para prensa escrita formato papel y 1% para radios FM comunitarias.

La normativa establece que los organismos públicos que inviertan en publicidad deberán, antes del 30 de marzo de cada año, rendir cuentas al Ministerio de Industria, Energía y Minería de la publicidad realizada el año anterior. Además, el decreto exhorta a los organismos y empresas estatales a “no tercerizar en agencias de publicidad, agencias de medios ni ningún otro intermediario” la distribución, presupuestación y pago de la publicidad, un mecanismo muy utilizado en la asignación de pauta oficial.

En su cuenta de Twitter, el exdirector nacional de Telecomunicaciones Gustavo Gómez opinó que la medida gubernamental se trata de “un subsidio encubierto usando fondos públicos destinados a publicidad oficial”, ya que carece de criterios técnicos para la asignación. Consideró asimismo que la asignación es “injusta”. “¿Por qué un periódico que no lee nadie recibe lo mismo que otro de la misma localidad que lo leen miles de personas? Irá el mismo dinero a un medio sin páginas (u oyentes o televidentes), que a empresas periodísticas con trabajadores en planilla”, cuestionó.

Por otra parte, Gómez consideró que el criterio “puede llegar a ser discriminatorio” con las radios comunitarias, ya que las comerciales son 250 en el interior y reciben 40% de la publicidad, mientras que las comunitarias son 150 y sólo reciben 1%.

Como aspecto positivo, Gómez destacó que la lista de medios beneficiados y la asignación de los recursos públicos será pública.