Pasaron ocho meses desde que el director de la Secretaría Nacional de Inteligencia, Álvaro Garcé, entregó copias del Plan Nacional en la materia a los legisladores presentes en la Comisión de Control y Seguimiento del Sistema Nacional de Inteligencia del 24 de octubre. Nueve días después, el contenido del informe se filtró al público y el propio Garcé apuntó a los legisladores que integran la comisión, denunció el hecho en Fiscalía pero finalmente fue archivado.

Este lunes, el jerarca, que se retiró sin hacer declaraciones, volvió a comparecer ante la comisión, que se llevó a cabo en dos partes. Por un lado, una puesta en común sobre los acontecimientos en torno a la filtración del plan en la que hubo un “pedido de disculpas” por parte de Garcé, según contó el diputado frenteamplista Mariano Tucci en rueda de prensa. Por otro, en un tramo de la sesión declarado secreto, el director repartió un documento y contestó preguntas en torno al trabajo de la secretaría.

Según Tucci, no se trata de que el episodio de la filtración “quede atrás”, sino de que los legisladores eligieron “que el funcionamiento de la comisión prime por encima de lo que ha acontecido en los últimos meses”.

“Valoramos tremendamente que el director Garcé haya hecho una autocrítica de la situación [en la] que [se] está, y en particular de su participación en ese evento tan desgraciado para la vida de nuestra democracia republicana”, continuó Tucci, y agregó que los legisladores realizaron un “descargo” sobre lo sucedido.

De todas formas, destacó “la actitud que tuvo Garcé de reconocer que se equivocó en la forma en la que denunció ante Fiscalía”; ahora, marcó, la tarea de los legisladores es “dedicarnos a hacerle el seguimiento a toda la actividad de inteligencia que tienen las agencias de seguridad del Estado”.

Hubo “informes de determinada sensibilidad”

Por su parte, el diputado del Partido Nacional Álvaro Viviano entendió que tanto los legisladores como Garcé tenían “la necesidad de restablecer un orden que se había visto interrumpido” por “un episodio que nos trancó en el trabajo”.

En tanto, la segunda parte de la reunión “fue específica de nuestra tarea y fue una parte declarada reservada” en la que se trataron “informes de determinada sensibilidad dados en la competencia del secretario” que la comisión tratará “con el celo que el reglamento indica”.

Consultado respecto a la filtración en internet de archivos de la dictadura, Viviano señaló que es “un tema puntual”, que “seguramente será parte de futuras tareas de coordinación”, pero no se trató en esta reunión.