El centro de la ciudad de Fray Bentos no es muy diferente del de varias capitales del litoral del país, y tampoco el resto de la ciudad, salvo por dos detalles: uno, que a ocho kilómetros tiene el balneario Las Cañas, sobre el río Uruguay; el otro, que desde noviembre de 2022 están operativas las cámaras y los radares de tránsito de la empresa argentina Teslights, los cuales en poco más de un año de funcionamiento generaron una marcha de cientos de personas y ameritaron un llamado a sala al intendente, Omar Lafluf, por parte de la Junta Departamental de Río Negro.

La junta votó el llamado por unanimidad en una sesión extraordinaria el 2 de enero, en la que decidió “elevar los antecedentes al Tribunal de Cuentas y convocar a la empresa a la Comisión de Legislación de la junta para que explique el proceso de adjudicación”, contó a la diaria el edil del Frente Amplio (FA) Walter Cardozo. Es que el asunto tiene, por lo menos, dos aristas: una de ellas son las multas, que, según los vecinos que se movilizaron el 19 de diciembre, están mal puestas; la otra es la licitación por la que resultó ganadora la empresa argentina.

Sobre el proceso de contratación, Cardozo explicó que “la modalidad es muy curiosa porque es a resultados”, lo que implica que lo que se recauda por las multas que la Intendencia de Río Negro (IRN) carga en el Sistema Único de Cobro de Ingresos Vehiculares (Sucive), 50% se destina a la empresa a modo de pago. El porcentaje se acordó en el pliego de licitación abreviada 4/2022 de la IRN, al que accedió la diaria, proceso que tuvo como único oferente a Teslights. Más tarde, el intendente dijo a la junta “que había renegociado para bajarlo a 35%”, indicó Cardozo; sin embargo, fuentes consultadas por la diaria señalaron que sigue siendo un porcentaje alto.

Frente Amplio pide rescindir el contrato y dejar sin efecto las multas no pagas

Este jueves, el FA de Río Negro ofreció una conferencia de prensa en la que repasó estos detalles y aportó otros. En una declaración leída por el exintendente frenteamplista Óscar Terzaghi, se señaló que “la cantidad de multas elevadas al Sucive para su publicación” entre el 6 de junio y el 4 de diciembre de este año “ascienden a 29.601”, que equivalen a “54.547 unidades reajustables (UR), que al valor de 1.634 pesos la UR significan 89.129.798 pesos”.

De ese total, 54% pertenece a vehículos empadronados en Río Negro, donde la IRN, según la información que maneja el FA, “ha recaudado por concepto de cobro de las multas elevadas al Sucive en 2023 21.769.162 de pesos”. Un detalle: el tope de pago para el caso de las licitaciones abreviadas –la modalidad por la que se contrató a Teslights– es de 11.012.000 pesos. Por eso es que el FA entiende que con lo que se calcula que la empresa recaudó hasta el momento, el contrato “debe considerarse agotado”, porque se cumplió “con los montos originales correspondientes a la empresa”.

Es por eso que solicitaron al intendente “que dé por finalizado el contrato con la empresa Teslights” y que se “baje del Sucive las multas ya elevadas de los vehículos matriculados en el departamento de Río Negro que aún no han sido pagas o convenidas”, así como que se deje “sin efecto el sistema de cámaras y fotomultas, autorizando a la empresa propietaria de estos a su retiro”.

En el Partido Nacional “preocupa” la cantidad de multas

Los cuestionamientos no surgen únicamente desde la oposición departamental. El edil del Espacio 40 del Partido Nacional (PN) Fernando Quintana dijo a la diaria que en su sector “preocupa” la situación por los mismos motivos que esgrimió el FA, principalmente porque “en Río Negro, fundamentalmente en Fray Bentos, que es el único lugar donde se está aplicando el sistema de fotomultas, estamos hablando de alrededor de 29.000 multas” y que, “si se hace un cálculo en relación a las multas que se cobran en Montevideo, acá debería haber unas 10.000, pero estamos casi tres veces por encima”.

En tanto, el también edil del PN, pero del sector de Lafluf, Samuel Bradford, dijo a la diaria que prefería no “apresurarse” en opinar antes de que el jefe comunal vaya a la junta. Más allá de que entiende que “los vecinos estén molestos porque dicen que no cometieron infracciones y les aparecen multas”, asunto que “hay que ver”, el PN “no quiere meterle la mano en el bolsillo a nadie”. “Es una cuestión de sentido común; primero, porque no se debe hacer, y segundo, ¿quién arriesgaría a enojar a los vecinos en vísperas del ciclo electoral? Es ilógico”, sentenció.

Según contó Carlos Nobelasco, exedil frenteamplista y actual residente de Fray Bentos, la indignación que culminó con una movilización de vecinos comenzó cuando recibió, según él, su “primera multa en 50 años”, mucho tiempo después de jubilarse como chofer de ómnibus. Seguro de que no había cometido una infracción, decidió publicarlo en su cuenta de Facebook. De a poco, comenzó a sumarse la gente en la misma situación: la mayoría de los perjudicados están en “una franja etaria de 40 a 80 años”, y si bien a la mayoría “le han aplicado multas por supuestamente ir a 53, 57 o 75 kilómetros por hora, cosas insólitas”, el caso que Nobelasco cita como emblemático es el de un hombre que fue captado por una cámara “en la que pasa a 45 km/h, y en la siguiente, tres cuadras después, a 138 km/h”, algo que calificó de “imposible”.

La convocatoria comenzó a crecer hasta llegar a ser 200 personas en una reunión en la que se definió hacer una “marcha a pie” el 19 de diciembre. Luego de la marcha, el intendente se comunicó con el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU) para que revise y homologue el funcionamiento de las cámaras. De acuerdo a una noticia publicada el 28 de diciembre en la web de la IRN, el trabajo del LATU y de una delegación de la Unidad Nacional de Seguridad Vial comprobó que el sistema de fotomultas estaba “funcionando correctamente”.

la diaria intentó comunicarse sin éxito con el intendente Lafluf y con el director de Tránsito de la IRN, Nazario Pomi.

Director de Teslights: “La empresa no hace multas, sólo recopila información”

“Los equipos estaban certificados en origen, fueron revalidados por el LATU, pasando por su tercera inspección”, señaló el director de Teslights, Álvaro Muscio, durante una entrevista con el programa Código QR, de Rincón 107.7 FM, el 28 de diciembre. “Son los equipos más auditados de todo Uruguay”, aseguró Muscio, y señaló que además el Sucive contestó “un requerimiento validando todo de manera contundente”, y por eso dijo no ver “real la posibilidad de rescisión”.

“Por supuesto que entendemos la molestia de la gente. Lo que sí sabemos también es que todo pasaje de la fiscalización tradicional a fotomultas siempre fue doloroso”, reflexionó Muscio; asimismo, apuntó que “99% de los vehículos a los que se les mide la velocidad no registran incidencia. También entendemos que esa minoría [que comete infracciones] es mucho más ruidosa”. Muscio también recalcó que “la empresa no hace multas, sólo recopila información”, y que “cada infracción debe ser comprobada por un humano [funcionario municipal] para ser cargada”, sentenció.