El presidente Luis Lacalle Pou se refirió este miércoles a los últimos hechos de violencia que marcaron la agenda, como el homicidio cuádruple en Maracaná, y reconoció que este gobierno no ha podido “con el tema de los homicidios”.
“Lo que nunca he hecho, y no voy a hacer en los días que me quedan de gobierno, es poner excusas. Hay una enorme preocupación por los homicidios”, expresó en rueda de prensa en Mercedes durante la inauguración de obras en la Universidad Tecnológica en ese departamento. Y continuó: “Nunca escucharon a este gobierno decir que era ajuste de cuentas. Son homicidios, hay vidas que se pierden. Y en este caso, además, la vida de un niño”.
El presidente dijo que lo que no comparte al discutir sobre este tema es que se utilice como “plataforma de campaña” y que la “arenga” sea “los niños heridos o muertos”. Si bien señaló que el récord de homicidios fue en 2018 y “ahora se mantiene estable desde hace mucho tiempo”, también reconoció que eso “no está bien” y “lamentablemente” es una situación que se mantiene “desde hace diez años”.
Asimismo, el mandatario reiteró que durante este gobierno los delitos han descendido por “primera vez en muchísimos años”, según datos del Observatorio Nacional sobre Violencia y Criminalidad del Ministerio del Interior. “Han descendido sensiblemente los hurtos, han descendido sensiblemente las rapiñas, ni que hablar el abigeato”, pero “hay que decir la verdad: los delitos han bajado, no podemos con los homicidios”, subrayó.
Lacalle Pou dijo que hay acciones que se pueden tomar para prevenir algunos delitos y situaciones que, a veces, terminan en homicidios, por ejemplo en los casos en los que se tiene información sobre “una banda que se está dedicando a rapiñar” en Montevideo o en cualquier parte del país, “con policía e investigaciones, y con las propias seccionales, se puede llegar a prevenir”. Pero hay otros casos que son más complejos: “A ver, se pelean una fiesta y se pegan un tiro, ¿cómo se hace para prevenir eso? Insisto, no estoy poniendo excusas, simplemente aceptando que han bajado sensiblemente todos los delitos, salvo el del homicidio que se mantiene estable”.
En relación al cuádruple homicidio de Maracaná, el jerarca dijo que “lo interesante” es que “se tienen elementos importantes para poder resolver este crimen”, que no pudo adelantar para no interceder con la investigación. “Creo que este delito rápidamente debería de aclararse y también los móviles del delito. Porque según tengo entendido, no es un hecho aislado. Es un conflicto que se venía extendiendo en determinado grupo de personas ya hace mucho tiempo”, señaló.
Políticas de Estado en seguridad
El presidente reiteró la importancia del establecimiento de políticas de Estado en materia de seguridad, pero comentó que en eso su gobierno no tuvo “mucha suerte” porque “se hicieron propuestas y la mayoría o se rechazaron o no se siguió el documento”. “Curiosamente, alguna de esas cosas que el gobierno propuso al resto de los partidos, hoy están en la plataforma de otros partidos políticos. Cosa que nos alegra, porque cuanto más estemos de acuerdo en eso, mejor”, añadió aunque no aclaró a que medidas se refería.
Lo que sí mencionó fueron “algunas discrepancias de base” como la “famosa ley de liberación de presos del año 2005, 2006, que liberó objetivamente a los presos sin tener en cuenta la conducta en el establecimiento carcelario” o cuando quienes hoy están en el gobierno eran oposición pidieron “modificar el artículo 222 del Código de Niñez y Adolescencia, que lo que hacía era borrar los antecedentes de los menores, nosotros no estuvimos de acuerdo”.
“La política sobre drogas ha sido mucho más firme y mucho más fuerte en este gobierno. No me crean a mí, vayan a los registros: récord de incautación de dinero, récord de incautación de estupefacientes, récord de incautación de automóviles, récord de indagados y procesados por narcotráfico”, expresó Lacalle Pou y planteó que aunque en algunas cosas “no vamos a estar de acuerdo, vamos a tratar de dejar de lado y hablar de las que sí estamos de acuerdo”.
A su vez, dijo que es “lógico” que la seguridad “sea un tema de campaña”, “lo que nosotros decimos es en qué nos ha ido bien, o qué nos ha ido mejor, y todavía lo que no hemos podido solucionar”.
El mandatario también fue consultado por el sistema penitenciario que está “colapsado” y dijo que esa situación viene desde antes y en este gobierno la cantidad de reclusos aumentó alrededor de “3.000”: de una población carcelaria de 11.000 personas se pasó a 14.000, apuntó. Sobre este tema añadió que cuando esta administración termine habrá “más de 2.000 y pico de plazas nuevas” en las cárceles.
“Este gobierno va a ser el que más plazas va a construir para que no haya hacinamiento.Todos sabemos que si un recluso, por más que se merece estar preso porque cometió un delito, no tiene asegurada una posibilidad de reinserción, tiene serias chances de la famosa puerta giratoria. Hay más presos porque hay más acción policial, porque se está, de alguna manera, cumpliendo con el rol de persecución del delito y condenar el delito, y al mismo tiempo estamos construyendo cárceles a lo largo y ancho de todo el país”, manifestó.