El gobierno argentino, que este semestre tiene a su cargo la presidencia pro témpore del Mercosur, convocó para el 11 de abril a una reunión informal de cancilleres del bloque.

Según informó la semana pasada el diario Clarín de Argentina, el gobierno de Javier Milei se propone poner sobre la mesa nuevamente propuestas de flexibilización del Mercosur que permitan a los países hacer acuerdos bilaterales sin el aval de los socios del bloque. El canciller Gerardo Werthein dijo al diario La Nación que la Cancillería argentina ya presentó su propuesta en la reunión de coordinadores nacionales del Mercosur, este mes.

Consultado al respecto por la diaria, el canciller uruguayo, Mario Lubetkin, aseguró que todavía “no hay ninguna propuesta” y que por ahora la flexibilización “no es un tema”. De todos modos, señaló que cuando llegue una iniciativa, se estudiará “y después veremos”. Remarcó que la prioridad de Uruguay será que el bloque no se quiebre y para ello “tiene que haber comodidad de los países”. “No queremos una fractura del Mercosur. No puede haber Brexit y no creo que haya Brexit del Mercosur”, afirmó.

El canciller aseguró que se buscarán los caminos para que el bloque pueda avanzar, y que una de las prioridades será concretar la implementación del acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea. También están en curso negociaciones para concretar acuerdos comerciales con Corea del Sur y con Indonesia.

Rumbo en política exterior: diálogo y apuesta por el multilateralismo

Este miércoles, Lubetkin recibió en el Palacio Santos a los embajadores acreditados en Uruguay para comunicarles las orientaciones del país en materia de política exterior. El canciller advirtió que estamos ante un escenario internacional “complejo, dinámico, de realidades cambiantes”. En ese contexto, destacó que la política interna “moldea los principios y las características de la política exterior, y esta, a su vez, también influye e influirá en la dinámica interna”.

“Somos un pueblo de paz y el mundo siempre nos encontrará procurando el diálogo, entendimientos, la aplicación del derecho internacional, apoyando la búsqueda de soluciones pacíficas a los diferendos, con respeto a la soberanía, la no intervención en asuntos internos y, naturalmente, en encuentros de culturas, la riqueza de las diferentes culturas con tolerancia”, enumeró Lubetkin.

El canciller aseguró que nuestro país quiere ser “proveedor de soluciones a las amenazas globales” en la medida de sus posibilidades, que buscará fortalecer el multilateralismo, cuidar los valores de la paz y la democracia, y otorgar una atención especial a los mecanismos de integración.