Tal como lo adelantó el canciller, Mario Lubetkin, en conferencia de prensa, el presidente de la República, Yamandú Orsi, decretó duelo oficial para el día del sepelio del papa Francisco, que tendrá lugar este sábado en la plaza San Pedro.
El lunes de mañana, el Vaticano anunció la muerte del papa Francisco, el arzobispo de Buenos Aires Jorge Bergoglio, a los 88 años. Horas después, el gobierno uruguayo lamentó “profundamente” el fallecimiento del pontífice y lo recordó como una “persona humilde, mensajera de paz y diálogo”, al igual que “pensador y divulgador de las grandes causas de la humanidad, del bien común, de la justicia social, del cuidado del ambiente, de la compasión, que siempre estuvo cerca de los más desamparados y necesitados”.
Este miércoles, con la firma de todo el gabinete ministerial, se formalizó la decisión del Ejecutivo de declarar duelo oficial el día del sepelio “del máximo representante de la Iglesia católica”.
El documento considera a Francisco “un incansable luchador por la paz y los derechos humanos”, y destaca “que su vida fue un ejemplo de generosidad, bondad y compromiso con la paz y el bienestar de los pueblos”.
El decreto de duelo implica que la bandera nacional “permanecerá a media asta el día indicado” en todos los edificios públicos, embajadas de la República en el exterior, cuarteles, fortalezas, bases aéreas y buques de guerra. Asimismo, los organismos que integran la administración pública no realizarán actos oficiales el sábado.
El féretro del papa fue trasladado este miércoles desde la capilla de Santa Marta hasta la basílica de San Pedro, donde permanecerá hasta el viernes a la noche, previo al funeral, para la visita de los fieles que desean dar su último adiós.