El intendente reelecto de Paysandú, Nicolás Olivera, lamentó que todavía no haya “escuchado una sola idea” por parte de los tres aspirantes a presidir el directorio del Partido Nacional (PN), y vaticinó un problema en la conducción del partido, ya que “todos reconocen que hay una figura que aglutina, pero esa figura no está en el bolillero”, en referencia al expresidente Luis Lacalle Pou.

Entrevistado por la diaria Radio, Olivera sostuvo que “le falta mucho más de popular” a su fuerza política, pero “mientras sigan siendo los mismos prohombres que tengan esta vocación de gobernar el partido, vamos a seguir igual”.

Reconoció que hoy “parece que el único salvavidas que el partido tiene para adelante se llama Lacalle Pou”, lo cual “no le hace bien a un partido”. Para Olivera, “históricamente al partido le fue bien cuando ha tenido pesos y contrapesos”, algo que, a su entender, “al gobierno de Lacalle le faltó”.

El actual senador blanco —que asumirá al frente de la Intendencia de Paysandú a principios de julio— consideró que el expresidente “tendría que haber agarrado el directorio”, ya que “es un hombre con mucho peso para estar afuera” y podría terminar “desautorizando” al futuro presidente. “¿Quién te garantiza que Lacalle mañana no diga ‘para mí esto hay que resolverlo’ o ‘mi posición es tal’?”, cuestionó Olivera.

Según Olivera, Lacalle Pou “habló de que se va a tomar un tiempo, pero en algún momento va a volver”; y acotó que, en ese momento, habrá “que ver cómo se administra su vínculo entre sus ideas, sus posturas personales, en sus pretensiones quizás electorales para adelante, con las institucionales del partido”.

“Es un hombre respetuoso de las instituciones, pero me parece que no está bueno que haya un poder paralelo, una figura de mucho peso paralelo a la de un directorio. Hay que ver cómo se maneja con eso”, sostuvo Olivera.

Sobre la elección del presidente del directorio: “Hasta ahora he escuchado nombres nada más”

Las elecciones a la presidencia del directorio blanco serán el sábado 28 de junio. Hay tres candidatos confirmados: Álvaro Delgado por Aire Fresco, Luis Alberto Heber por el Herrerismo y Javier García por Alianza País.

“Yo hasta ahora he escuchado nombres nada más. No he escuchado una sola idea, una sola propuesta, una sola línea de cómo se quiere conducir el directorio los próximos cinco años”, aseveró Olivera.

El sector D Centro, al que pertenece Olivera, se reunirá este martes para tratar las distintas candidaturas para la presidencia del directorio del PN, pero el intendente adelantó algunas de sus impresiones.

A propósito de las críticas desde el PN a la exvicepresidenta Beatriz Argimón, quien será propuesta por el gobierno como representante de Uruguay ante la Unesco, Olivera aseguró, en referencia a García, que le “apena” que “alguien que tiene aspiraciones y piensa orientar la conducción, o tener la conducción de todo el partido, oriente un sector que se permita decir estas barbaridades”.

Sobre Delgado, aseguró que “hay muy buena relación” y destacó que “ha sido abierto”, no sólo “en tiempos políticos y electorales”, sino también cuando fue secretario de Presidencia en el período pasado. “Estuvo en presencia, marcó, estuvo, la verdad que en ese sentido creo que cumplió con creces su rol”, aseguró.

En cuanto a Heber, quien presidió el directorio del PN entre 2011 y 2018, Olivera consideró que es una de las “instituciones del partido”. Acotó que “fue un buen presidente del directorio” y, desde ese rol, “uno de los que fueron construyendo la victoria del partido” en 2019. Aunque reconoció, “quizá con una visión distinta a la nuestra también, pero ni mejor ni peor, distinta”. “Es un tipo que tiene una enorme vocación de diálogo también, es un tipo de mucha amplitud para dialogar”, valoró.

Al respecto de su agrupación, Olivera comentó que tienen el desafío de “encontrar la esencia, explotar la esencia de lo que somos”. Consultado sobre si D Centro debería construir una figura que pueda ser precandidata presidencial en 2029, el intendente consideró que “tiene la vocación más que de pensar en personas, pensar en ideas, aportar ideas, aportar improntas, aportar sensibilidades”. Aseguró que es una agrupación, sobre todo, muy descentralizadora y pragmática, que pretende ser una tercera expresión dentro del PN, con mucha más presencia territorial, y más cerca de lo que “podríamos definir como wilsonismo que a otras ideas”.

Larrañaga inculcó “hacer lo correcto por sobre lo conveniente”

Desde la gestión de Jorge Larrañaga, también wilsonista, ningún intendente sanducero había logrado la reelección, hasta este mayo con el triunfo de Olivera. Al respecto de la figura de Larrañaga, Olivera destacó que se formó con él y reconoció que, “si algo inculcó, era hacer lo correcto por sobre lo conveniente”.

Recordó algunas de las iniciativas del fallecido exministro del Interior, en las que fue “contra las vacas sagradas del partido, contra determinado establishment”, y sostuvo: “Vos veías que era una pared, te ibas a dar contra la pared, te ibas a hacer moco contra la pared. Pero el tipo te inyectaba las ganas de salir a darte contra la pared”.

Olivera consideró que “sigue estando el establishment” del PN y agregó que “le falta cercanía al partido”. “Los problemas de la gente no todos pasan por el Palacio Legislativo”, afirmó, y cuestionó que “el poder del partido radique solamente en gente que logre un cargo”.