Un ciudadano ruso, de 39 años, viajó a Montevideo desde Buenos Aires el domingo 17 de marzo. Vino por el día, en el buque Papa Francisco, de la empresa Buquebús, que salió a las 7.30 de Buenos Aires, y lo tomó de regreso, en Montevideo, a las 20.15. El Ministerio de Salud Pública (MSP) confirmó esta noche que el viajero tenía sarampión y por eso anoche emitió un comunicado, en el que insta al resto de los pasajeros de esos viajes a que tomen precauciones. En primer lugar: revisar que cuentan con las dos dosis de la vacuna triple viral (contra sarampión, rubeola y paperas). Además, recomienda consultar al médico en caso de tener fiebre, erupción cutánea, conjuntivitis, síntomas respiratorias hasta dos semanas después del viaje, y avisarle que pudo haber estado en contacto con un caso de sarampión. Las precauciones se extienden, también, a quien haya estado en contacto con el ciudadano ruso.
El sarampión es una enfermedad causada por un virus que produce un cuadro potencialmente grave y es altamente contagiosa. Uruguay no registra casos autóctonos desde 1999. Los pocos casos importados que se han detectado desde entonces no han causado contagios, pero el MSP está muy preocupado por la situación regional y mundial: las Américas habían eliminado esta enfermedad en 2016, pero hubo un retroceso luego, al igual que en países como Europa, debido a las bajas coberturas de vacunación.
Según el último resumen de situación del sarampión en las Américas, del 4 de marzo, la Organización Panamericana de la Salud informó que diez países han notificado casos de sarampión en lo que va del año: Argentina, Bahamas, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, México y Venezuela.
¿Quiénes deben vacunarse y quiénes no?
La vacunación es gratuita, no requiere receta médica y puede administrarse en cualquier vacunatorio del país. Quienes nacieron antes de 1967 no necesitan vacunarse, porque estuvieron expuestos naturalmente al virus. El Certificado Esquema de Vacunación incluyó, en 1986, dos dosis contra el sarampión, que es lo recomendado. Muchos de quienes nacieron entre 1968 y 1986 cuentan con una sola dosis; por eso, las autoridades instan a darse también la segunda. A aquellos que no puedan comprobar si tienen o no esa segunda dosis (puede figurar en el carné como vacuna doble viral o triple viral, o con la leyenda Chau Sarampión), el MSP les recomienda dársela nuevamente.
Para extremar las precauciones y evitar el daño que puede provocar en niños, en febrero el MSP adelantó la segunda dosis en niños: en lugar de ser administrada a los cinco años, lo será a los 15 meses de edad. La primera dosis debe suministrarse a los 12 meses. El MSP recomienda vacunas a los bebés de seis a 12 meses de edad que hayan tenido contacto con casos de sarampión o que viajen a zonas donde existe transmisión del virus (incluidos los aeropuertos); se le llama “dosis cero”, porque deben recibir igualmente las previstas en el calendario vacunal, a los 12 y a los 15 meses de edad.
No pueden ser vacunados contra el sarampión los bebés menores de seis meses, las embarazadas, personas alérgicas al huevo y quienes tienen inmunosupresión severa. Como recuerdan siempre las autoridades sanitarias, la protección de esas personas depende de la buena cobertura vacunal de la población (cercana a 95%), de ahí la importancia de que quienes puedan hacerlo, se vacunen, y contribuyan a evitar la circulación del virus.