La mutualista Médica Uruguaya emitió un comunicado el martes de noche en el que informó de nueve casos de coronavirus en sus instalaciones, siete de ellos de trabajadores de la salud, tras el ingreso de un paciente que no se detectó que era portador del virus.

El paciente estuvo cinco días internado “por una descompensación de una enfermedad crónica” sin que presentara “síntomas evocadores” de covid-19. Siete días después de recibir el alta, volvió a ser ingresado por “sintomatología respiratoria”. En esta última ocasión sí se le hizo el test de coronavirus, que dio positivo.

A raíz de ese diagnóstico, la mutualista aplicó pruebas a todas las personas con las que estuvo en contacto el paciente durante su primera internación. “Como resultado de la búsqueda se identificaron ocho casos secundarios, correspondiendo a un usuario y siete integrantes del equipo de salud”, indica el comunicado.

Para mantener la asistencia segura de sus usuarios, la mutualista va a recoordinar “algunos procedimientos quirúrgicos y otras actividades asistenciales”. La mutualista continúa realizando pruebas y unos 50 trabajadores están en cuarentena.

El comunicado llegó minutos antes de que el Sistema Nacional de Emergencias informara que los casos de coronavirus diagnosticados entre lunes y martes son ocho, todos correspondientes a Montevideo. Esta cifra coincide con el número de positivos obtenidos en la mutualista en las últimas horas, ya que el primer caso había sido confirmado días antes. Además, el comunicado informa que en total son 17 los casos activos de covid-19 en personal de la salud.

Fuentes del Comité de contingencia de la Médica Uruguaya informaron a la diaria que el paciente (caso índice) había ingresado a la emergencia y había estado cuatro días internado en sala. El otro paciente que se contagió fue con el que compartía la habitación. El llamado caso índice había vuelto a consultar el domingo, con síntomas respiratorios pero con buen estado de salud; la mutualista aplicó el protocolo y le hizo el test, que dio positivo. Ahí comenzó el rastreo del paciente con quien había compartido la sala y con todo el personal de salud que había estado en contacto con él. Entre el lunes y el martes de mañana se hicieron los test que dieron positivos, y eso provocó un nuevo rastreo de todos los contactos con sus respectivos hisopados. El martes de noche, la mutualista estaba pidiéndole a “turnos enteros” de enfermería y de profesionales que no concurrieran a trabajar, por precaución. También le estaba consultando a los trabajadores con resultados positivos si trabajan en otras instituciones de salud, para avisar en esas empresas de la situación. La fuente consultada aseguró que se cumplieron los protocolos y que los funcionarios usaron mascarilla quirúrgica, pero reconoció que hubo errores en el uso de equipos de protección personal.