La Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) comunicó este viernes que inició una investigación administrativa y una denuncia penal tras la rotura de un ecógrafo del hospital Maciel, valuado en 30.000 dólares.
En diálogo con la diaria, Eduardo Henderson, el gerente general del prestador público, explicó que el hecho se detectó este jueves. “Es un ecógrafo destinado al block quirúrgico que se usa bastante”, muchas veces se necesita en CTI, se prestó, volvió al block “en buenas condiciones”, pero luego alguien pasó por la sala y encontró el aparato “en el suelo”. Para Henderson, es “evidente que la rotura fue intencional” y que alguien puede haber colocado mucho peso arriba del aparato y eso generó que “la parte de arriba se partiera en dos”.
Se inició la investigación interna y la denuncia también por un hecho que ocurrió el 17 de noviembre en el mismo hospital. En ese caso, se encontró “cortado” un cable que alimenta la torre de laparoscopia del block quirúrgico. “Se cortó intencionalmente”, sostuvo.
Los dos insumos son “muy costosos”. El prestador espera que la Justicia “colabore” con esclarecer los hechos y, además, ASSE espera centrar la investigación en las personas que ingresan a block quirúrgico los días y en los horarios que ocurrieron las roturas. El ecógrafo quedó inoperativo por el momento, y se estima que este viernes se analice el costo de la reparación y el tiempo que eso llevará.