Hace casi un año el hospital Maciel emprendió la reparación del angiógrafo, adquirido en 2019, y del tomógrafo, que también se dañó en ese momento.
En diálogo con la diaria, Martín Rodríguez, jefe del servicio de imagenología, explicó que el angiógrafo está funcionando desde hace algunos meses y se utiliza cada vez más en intervenciones complejas. Cuando se adquirió el equipo “no contaba con funcionarios médicos específicos” y, tras un año y medio de funcionamiento, la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) destinó a un equipo específico que permitió que ahora el aparato esté disponible las 24 horas del día, todo el año.
Además de reparar la herramienta, se instaló un estabilizador de corriente para evitar próximas roturas. El aparato resulta útil, ya que en la zona del centro de salud el nivel de tensión varía y los cambios muy bruscos en el suministro al aparato pueden generar una nueva rotura.
El angiógrafo está a disposición de todos los usuarios de ASSE, aunque quienes se atienden en el Maciel tienen prioridad. Si bien el servicio no se vende a prestadores de salud privados, se realizan procedimientos extra que son financiados por el Fondo Nacional de Recursos: neurointervenciones, cirugías vasculares con endoprótesis aórticas, cirugías vasculares por malformaciones, radiología intervencionista y tratamientos dentro de procesos tumorales.
Consultado sobre si el flujo de pacientes de algún centro en particular, por ejemplo, el Hospital del Cerro, genera demoras o sobrecarga de procedimientos, Rodríguez sostuvo que si bien desde ese centro pueden surgir situaciones que requieran derivación y uso del angiógrafo, no es muy diferente a la demanda de otros centros de Montevideo y el interior del país.
Sobre el tomógrafo, detalló que “está en camino” el repuesto y que se estima que la próxima semana quede disponible. Además, el hospital abrirá una licitación para adquirir un tomógrafo con mejores capacidades para reforzar el servicio y por próximas roturas.