El sindicato de la bebida analizará hoy la propuesta que presentará el Poder Ejecutivo sobre salarios mínimos y ajustes para el subgrupo 11 Bodegas, del grupo 1 Procesamiento y conservación de alimentos, Bebidas y Tabaco, de los Consejo de Salarios, y seguramente decidirá aceptarla, según informó el presidente de la Federación de Obreros y Empleados de la Bebida (FOEB), Fernando Ferreira, al portal del PIT-CNT y confirmó a la diaria. El convenio alcanzado en el sector el 29 de noviembre de 2016 terminó su vigencia el 30 de junio.

En diálogo con este medio, Ferreira dijo que las gremiales patronales (las más grandes del rubro son el Centro de Bodegueros del Uruguay y el Centro de Vitivinicultores del Uruguay) participaron en la primera convocatoria del Consejo de Salarios y manifestaron que “no iban a discutir ninguna plataforma ni ningún beneficio” para los trabajadores y que “iban a esperar lo que presentara el Poder Ejecutivo como propuesta”. “No llegamos a discutir. La idea era presentar alguna propuesta que analizara la situaciones de algunas bodegas, ya que no todo el sector es el mismo en Uruguay. Hay 15 bodegas que venden más de un millón de litros de vino, que están en mejor posicionamiento; hay otras 15 que están por encima de los 500.000 litros, que son las que tienen un poco más de espalda, y de ahí hacia abajo tenés a aquellas a las que les va más o menos o están en la supervivencia. Queríamos discutir qué posibilidades de mejora podíamos tener, ya que es un sector complicado en materia salarial”, señaló Ferreira.

El dirigente dijo que al no contar con la presencia ni con una propuesta de la delegación empresarial, van a aceptar la propuesta del Poder Ejecutivo que “posiciona al sector como medio, con 7,5 % de incremento en el primer año”. Por su parte los empresarios consideran al sector como “en problemas”, por lo que, de darse esa categorización, el salario arrancaría con un incremento de “un punto por debajo”. “Lo que el Ejecutivo nos plantea nos deja un punto por encima, por eso vamos a acompañar la propuesta. Pero como no hay un convenio entre partes, lo que se puede votar son los salarios mínimos. No hay cláusula de paz. Por lo tanto, quedamos liberados a que en las bodegas en las que tengamos organización sindical y apostemos a conseguir mejoras mediante convenios tendremos la posibilidad de hacerlo”, advirtió. Para Ferreira, las fiestas tradicionales y la vendimia, que se hace en marzo, “son momentos propicios para hacer algún tipo de movilizaciones y reclamos”.