Ayer a las 14.00 se reintegró el trabajador despedido por la empresa La Cataluña SRL, que opera la estación de servicio de ANCAP de Santa Clara de Olimar, en el departamento de Treinta y Tres, después de que la Justicia rectificara que se trataba de un acto “antisindical”.

La historia se remonta a principios de junio. Según resumió a la diaria Ana Silva, dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores del Metal y Ramas Afines (UNTMRA), luego del despido del empleado de la empresa, se hizo una reunión en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), que aconsejó que se lo reintegrara, y cuando el sindicato hizo una asamblea con los trabajadores de la estación, el dueño, Elios González, labró un acta con una escribana y dispuso el cierre del local. Más tarde, luego de la finalización de un raid que se desarrolló en Santa Clara, varios autos se fueron acumulando en la estación y, según Silva, rodearon a los trabajadores y empezaron a tocar bocina y a dedicarles cánticos “agresivos”, identificándose como integrantes del movimiento Un Solo Uruguay y del Partido Nacional (PN).

El confuso episodio motivó la reunión de dirigentes de la UNTMRA y el PIT-CNT con el directorio del Partido Nacional (PN) a mediados de julio, cuando se coincidió en que es fundamental “darles prestigio” a la política y a la actividad sindical. “Así como el PIT-CNT no puede responder por todas las manifestaciones de sus dirigentes, tampoco el PN es responsable por opiniones que puedan pronunciar algunos de sus dirigentes y mucho menos simples adherentes al partido”, dijo entonces el diputado nacionalista Pablo Abdala.

El 31 de julio el Poder Judicial determinó que el trabajador debía ser reintegrado –en un plazo de 24 horas–, ya que “la empresa no presentó pruebas para justificar el despido” y el magistrado consideró “que había un fin antisindical” en la decisión de desvincular del operario, contó a la diaria el abogado del sindicato, Manuel Echeverría. El trabajador se presentó un día después, a las 17.30, y en lugar de ser reintegrado se le comunicó que iba a ser enviado a seguro de paro. Echeverría sostuvo que no se trata de “reintegro efectivo” y, por el contrario, constituye “un nuevo castigo al trabajador”, ya que “se basa en un motivo falso porque falta de trabajo no hay”, lo que motivó una nueva denuncia que rectificó el fallo anterior.

En una entrevista con El País, el dueño sostuvo que ya había tomado a otra persona y que no tenía lugar para él. “No lo puedo poner a trabajar. Que esté sentado, porque tengo personal de sobra o mandaré a otro a seguro de paro. No sé que voy a hacer”, afirmó, quien dijo sentirse “desautorizado” por la Justicia.

Finalmente, Echeverría confirmó a la diaria que el trabajador fue reintegrado hoy y que llevó a cabo sus tareas “con normalidad”. Dijo que de momento se le había abonado la mitad de lo adeudado y que “resta que se le pague el mes de agosto que no pudo trabajar”.

Por su parte, el ex senador nacionalista Juan Martín Posadas presentó el lunes de mañana una moción al directorio del PN para que este se reúna de nuevo con la UNTMRA y autoridades del PIT-CNT a modo de “dar pasos, concretos y simbólicos, en dos sentidos: primero, contribuir permanentemente a la consolidación de un país libre, que rechace las prepotencias vengan de donde vengan; segundo, un propósito circunstancial, para el tiempo que corre, de substituir la sordera voluntaria y sistemática ante cualquier discurso discrepante, por una disposición primaria a escucharnos entre orientales, todos los orientales, los que piensan igual y los que piensan distinto”. “La moción fue aceptada y la mesa quedó encargada de establecer el contacto y designar la delegación”, dijo a la diaria.