El director de Movilidad de la Intendencia de Montevideo (IM), Pablo Inthamoussu, dijo a la diaria que la IM lo que busca es conservar los puestos de trabajo: “Estamos promoviendo la firma de un acuerdo para todo el sector y el primer punto establece que todo lo que estamos haciendo tiene el objetivo de dar viabilidad económica al sistema y estabilidad laboral a los trabajadores”.

Según el integrante del gobierno departamental, la IM propone “bajar en 12% los costos por kilómetro del sistema de transporte. Un 6% que se logra mediante la reducción de 20% de los gastos administrativos, 100% de las ganancias, y 100% de los pagos a algunos fideicomisos financieros que tiene el sector; y el otro 6% se conforma con el 7,5% de la reducción de la masa salarial”.

Sin embargo, los trabajadores de la Asociación Sindical de Cooperativistas y Obreros del Transporte (ASCOT) aseguran que esta nueva paramétrica implica una rebaja salarial de 12%”.

Inthamoussu aseguró que hay que hacer una reducción de costos e inyectar recursos; para esto último se está trabajado en un plan “de cuatro platillos” que “tienen que estar girando a la vez” y tienen que ver con los recursos extraordinarios que van a salir del Poder Ejecutivo y con los subsidios y recursos que serán cubiertos por adelantado por la IM.

Inthamoussu recordó que una medida que ya se tomó fue la reducción de la oferta, por eso muchas empresas enviaron a sus trabajadores al seguro de paro y otras usaron el mecanismo de la licencia adelantada. “Es tan grande el problema que ninguno de los actores tiene la espalda suficiente para soportar el tamaño de la crisis”, aseguró.

El jerarca sostuvo que si bien en un momento se evaluó el aumento del boleto se descartó de inmediato porque lo consideraron contraproducente. “Sería una medida poco inteligente cuando estamos perdiendo pasajeros. La variable de la tarifa está descartada”.

Además de vigilar que se cumplan las medidas sanitarias, la IM está controlando la cantidad de pasajeros, ya que si sube la demanda va a ser acompañada por una mayor cantidad de coches en la calle, en la actualidad trabaja el 70% de las unidades.

Con relación a la caída de la venta del boleto dijo que la demanda crece de forma muy lenta: “Llegamos a tener 20% de pasajeros, hoy estamos arañando 50%. Estamos en una situación inédita en el transporte. En el año 2002 no llegamos al 10% de caída y veníamos de ocho años consecutivos de baja en la cantidad de pasajeros, en esos ocho años estábamos en 30%. La otra crisis la detuvimos el año pasado, en cinco años la caída había sido de 15%. En 2020 la hipótesis más optimista dice que vamos a estar cerrando con una caída de 40%”.