Pasaban las 17.00 y los trabajadores y las trabajadoras de los distintos sindicatos seguían entrando al Palacio Peñarol, donde comenzó este viernes el XIV Congreso del PIT-CNT.

Unos minutos antes del inicio, el hasta ahora presidente de la central sindical, Fernando Pereira, dijo en rueda de prensa que asistía al encuentro con “sentimientos encontrados” y hasta “nervioso”, ya que era la última vez que formaba parte de un congreso. Este viernes, Pereira renunció formalmente, porque es uno de los candidatos a la presidencia del Frente Amplio (FA).

En el estrado, dijo: “Voy a levantar la licencia que pedí 31 días atrás para hacer uso de la palabra. Naturalmente este va a ser mi último día como dirigente del PIT-CNT, pero nunca voy a dejar de ser parte de este gran movimiento obrero”.

Pereira calificó como una “victoria popular” la elección de representantes en el Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública y aseguró que habrá otra victoria del movimiento sindical en las elecciones del Banco de Previsión Social.

El candidato a la presidencia del FA dijo que la central sindical tiene que estar “más unida que nunca” para enfrentar “las políticas neoliberales” y aseguró que el movimiento sindical “no precisa de ningún dirigente para seguir adelante”. Antes, en rueda de prensa, había dicho que él no se reunió con ningún dirigente para conversar sobre la conducción y aseguró que los trabajadores son sabios y podrán elegir el mejor esquema de dirección de la central sindical. El congreso discute desde este viernes sobre la conveniencia de mantener el esquema de presidencia y vicepresidencia, o volver a los coordinadores.

Con relación al tiempo que le tocó ser presidente del PIT-CNT, Pereira dijo que supo disfrutar cuando se ganaron las ocho horas para el trabajador rural, el convenio del trabajo doméstico y el empleo para las personas con discapacidad. También mencionó “una ley de responsabilidad penal empresarial que parecía que iba a llenar todo el Palacio Peñarol, y algunos palacios más, de empresarios presos”, pero “empresarios presos casi no hay, lo que hay son menos accidentes de trabajo, más cuidados de la salud y la seguridad, más equipamientos, y esas son alegrías que cualquiera de nosotros se lleva de este largo tiempo de dirección”.

Por su parte, el secretario general del PIT-CNT, Marcelo Abdala, dijo que Pereira supo poner ideas por encima de las suyas, ya que es el interés general de los dirigentes defender a la clase trabajadora. “Quien abraza la causa de la clase obrera, esté donde esté, siempre y en todo momento seguirá militando, así que un abrazo y aplauso muy fuerte a Fernando”, manifestó.

Sobre el congreso, Abdala señaló que es unitario “para angustia de los pensamientos dominantes”. Aseguró que a partir del 1° de marzo se consolidó un gobierno “gestado antes, cuando las clases dominantes generaron hegemonía, generaron sentido común en un largo proceso de por lo menos bastantes años. Está claro que este congreso deberá definir cómo nos vamos a enfrentar al gobierno del gran capital, al gobierno de capital financiero y los malla oro”.

Abdala llamó al segundo round para derogar los 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC), tras la recolección de las 800.000 firmas para convocar el referéndum. En el congreso se anunció que la Corte Electoral lleva validadas 525.000 firmas.

Marcelo Abdala, durante el XIV congreso del PIT- CNT, el 6 de noviembre, en el Palacio Peñarol, en Montevideo.

Marcelo Abdala, durante el XIV congreso del PIT- CNT, el 6 de noviembre, en el Palacio Peñarol, en Montevideo.

Foto: Alessandro Maradei

“La Corte Electoral, que viene confirmando las firmas de modo acelerado, cuando diga que hay fecha para el referéndum, este movimiento sindical, que no espera y que define con firmeza de principios [...], junto con las más diversas organizaciones sociales y políticas, generará un tsunami de Sí para dar por tierra con los 135 artículos de la ley de urgente consideración”, aseguró Abdala.

El secretario dijo que el congreso contribuirá a crear un programa de cambios profundos para los trabajadores y las trabajadoras.

“Somos una clase que quiere presentar una perspectiva grande en la cancha de la historia, porque entre nosotros nos relacionamos del modo en que queremos que se relacione la sociedad del futuro, sin explotados ni explotadores, entre iguales”, manifestó, y aseguró que en la central no hay una cúpula, sino que se trata de una pirámide invertida cuyo organismo supremo es el congreso: “Porque esta es la democracia obrera que se expresa”.