“No vamos a permitir que ningún trabajador de peajes se quede sin trabajo por un simple capricho de un gobierno que dijo que es un avance para el Uruguay automatizar los peajes. Un gobierno que está diciendo que no quiere generar desempleo en personas de más de 40 años, cuando del otro lado de la vereda hay trabajadores de más de 40 años quedándose en la calle, y sin mirar que son en su mayoría mujeres jefas de hogar”, dijo este jueves en conferencia de prensa Esther Olivera, representante de la rama peajes del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca), en el marco de un paro de 24 horas que se hizo en todos los peajes del país en defensa de las fuentes de trabajo.

El año pasado el entonces titular del Ministerio de Transportes y Obras Públicas (MTOP), Luis Alberto Héber, había anunciado que el gobierno iba a promover la obligatoriedad del telepeaje. En el actual proyecto de Rendición de Cuentas, que ya tiene media sanción, se estableció en un artículo esta obligatoriedad “para los vehículos automotores que circulen por las rutas nacionales”.

Este jueves la rama peajes del Sunca hizo paro y se concentró en la plaza 1º de Mayo, a pesar de la intensa lluvia. Si bien estaba previsto que se brindara una conferencia de prensa en ese lugar, por las inclemencias del tiempo esta se trasladó a la sede del Sunca, en la calle Yi.

La representante Andreina Álvarez dijo que si bien recibieron por parte del MTOP la promesa de una reconversión laboral y “una reubicación en otro lugar”, hasta el momento no les dieron “ninguna garantía”. “Las empresas que administran los peajes son todas constructoras que tienen alguna otra actividad y deberían velar por la fuente laboral de todos nosotros antes que por las decisiones que el MTOP dispone”, agregó.

En tanto, Olivera dijo que están “trabajando mal” porque no saben hasta cuándo van “a seguir” y porque reciben todo el tiempo las quejas de los usuarios por ser “la primera cara visible”. “No sólo tratamos con dinero y recaudamos para las arcas del Estado; también somos guías turísticas, nos preguntan dónde está tal o cual oficina para hacer un trámite”, contó.

Actualmente, y tras la aceptación por parte de unos 120 trabajadores de despidos incentivados, permanecen trabajando en peajes unas 240 personas.

Las representantes también mencionaron que el sistema presenta fallas, que se exigen depósitos por adelantado que a veces se adjudican a otras personas, que los vehículos extranjeros no están pagando porque en la noche, cuando no hay cajeros, se computa el cobro a la matrícula y se cobra a través del Sistema Único de Cobro de Ingresos Vehiculares, que no registra vehículos de otros países, y que los lectores de matrículas no funcionan correctamente cuando leen las del Mercosur, entre otros problemas detectados por el sindicato.

Las trabajadoras no están en contra de la automatización, sino que proponen que se continúe con el sistema mixto de cobro, manteniendo las fuentes de trabajo actuales y generando otras tareas para mejorar la atención al usuario.

Según Olivera, en una reunión mantenida con el actual titular del MTOP, José Luis Falero, recibieron la promesa de que se analizarían las propuestas y la seguridad de que se mantendrían los puestos de trabajo actuales, en principio, hasta diciembre. El 27 de agosto se volverán a reunir con el ministro para plantearle las propuestas.