Desde 2019, cada tercer jueves de noviembre se celebra en Uruguay el Día Nacional de la Cultura Emprendedora, creado en el marco de la Ley 19.820, que declara de interés nacional el fomento de los emprendimientos. Esta fecha tiene el objetivo de promover la cultura y la actividad emprendedora en el país. Este año, además de actividades que tienen lugar anualmente, la conmemoración coincidió con una nueva edición de la Semana Emprendedora Global, que reúne a personas emprendedoras e instituciones de todo el país para “inspirar y motivar” a otras a emprender y brindar herramientas para quienes ya tienen un emprendimiento, sostuvo a la diaria Ana Laura Trías, coordinadora de la Red Uruguay Emprendedor.

Aunque este día nacional sólo tenga cuatro años y las palabras “emprendedora”, “emprendedor” y “emprendedurismo” parecen haberse vuelto más comunes en el vocabulario cotidiano en los últimos años, el “ecosistema emprendedor” tiene un amplio recorrido en Uruguay, señaló Trías. De hecho, consideró que si emprender se ha puesto de moda, las y los uruguayos “somos recontra vintage”. “El ecosistema emprendedor uruguayo tiene más de 20 años de trayectoria. Ingenio, la primera incubadora [de empresas de base tecnológica] del país nació en 2001, pero incluso desde antes teníamos una lógica de trabajo articulado entre instituciones para apoyar y fomentar los emprendimientos. Durante muchos años esta experiencia estuvo muy centralizada en Montevideo y desde hace cuatro o cinco años la empezamos a trasladar a todo el ecosistema nacional”, manifestó.

Ese trabajo articulado y en red es organizado y gestionado por la Red Uruguay Emprendedor, que hoy integran más de 100 instituciones de todo el país entre empresas privadas, organismos estatales, cámaras empresariales, incubadoras, universidades y más. Todas comparten el propósito de dar apoyo a diferentes tipos de emprendimientos en sus distintas etapas, dijo Trías. La coordinadora destacó como un dato importante que del total de las instituciones integrantes 40% son del interior del país, en línea con el desafío de extender el “ecosistema emprendedor” a cada rincón del país.

“Lo que hace la red es articular el trabajo y el esfuerzo de todas las instituciones integrantes para lograr un camino de apoyo más sólido, más largo y para todas las etapas del camino emprendedor”, explicó la coordinadora. Por eso, la red está integrada sólo por empresas y organizaciones y no por personas, por la idea de que “las personas pasan y las instituciones quedan” y porque, de esta forma, es posible “generar apoyos distintos para cada etapa del emprendimiento”, señaló y continuó: “Un poco lo que buscamos es darle a emprendedoras y emprendedores un respaldo institucional y de largo plazo”.

La Red Uruguay Emprendedor dio sus primeros pasos en 2007 en el marco del Programa Emprender, creado por el Fondo Multilateral de Inversiones, la Corporación Nacional para el Desarrollo, el Laboratorio Tecnológico de Uruguay y Prosperitas Capital Partners. A partir del 2018 pasó a funcionar en la órbita de la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE), que le permitió avanzar en su consolidación a través de la definición de la gobernanza, la organización, los objetivos y desafíos de la red.

En cada etapa de cada emprendimiento

Para las instituciones interesadas en formar parte de este articulado existe un “manual” donde se explica cómo es el proceso, cuáles son los objetivos y plan estratégico de la red, y quiénes pueden ser miembros plenos o socios estratégicos, explicó Trías. Mencionó que uno de los principales requisitos para poder formar parte es que el cometido de la institución interesada sea “el apoyo a rendimientos” a través de “programas propios de emprendimiento”, “capacitaciones o talleres”, “presupuesto para financiar emprendimientos”, entre otras formas. Lo que no se permite es “cobrar por esos servicios”, dijo Trías, y agregó que por ese motivo, por ejemplo, no se aceptan consultoras.

La asistencia de las instituciones se distribuye en todas las etapas del emprendimiento, desde la gestación de la idea, la etapa de incubación, la puesta en marcha y hasta el crecimiento. “Cuando vos hablás de apoyo a emprendimientos enseguida se piensa en un apoyo económico. Ese apoyo está, pero a veces lo primero que necesita un emprendedor o un emprendimiento no es necesariamente plata. Hay un montón de otras cosas que el ecosistema y las instituciones que participan pueden brindar para desarrollar el emprendimiento. Incluso antes de que haya una idea”, expresó.

En esa línea, mencionó la experiencia de DESEM Junior Achievement, que trabaja con jóvenes en edad de secundaria para promover una “actitud más emprendedora”. “Incluso, ahora en conjunto con un montón de instituciones, incluida DESEM, universidades y el Instituto Nacional de la Juventud, entre otras, empezamos a pensar en cómo desarrollar actitud emprendedora en etapas cada vez más tempranas. Ese tipo de cosas hacen también a mejorar el entorno para emprender y motivar el emprendimiento y no es necesariamente un apoyo económico”, manifestó.

La red también cuenta con asistencia para quienes ya tienen una idea y quieren saber si es un proyecto viable. En ese caso se recurre a herramientas específicas para “validación de ideas de negocio”, dijo Trías.

“Cuando hay un mejor entorno para emprender, surgen más emprendimientos. Se generan demandas, oportunidades a nivel de capacitación, hay cambios culturales y sociales. A veces la generación de nuevos emprendimientos se ata a los términos económicos y a la idea de que más emprendimientos mejoran la economía, pero me parece que mejoran otras cosas también. Pensar en ir hacia un país más emprendedor y con personas con una actitud de solucionar problemas nos hace mejores como sociedad”, expresó.

Emprendimientos en Uruguay

La coordinadora de la red consideró que en Uruguay al hablar de emprendimientos aún hay “algunos estereotipos muy presentes”. “Si yo te pido que me describas a una persona emprendedora, seguramente pienses en un hombre, universitario y del rubro de la tecnología porque vinculamos el emprendedurismo al mundo de las startup y a ese tipo de trayecto”, señaló.

No obstante, para Trías, para cambiar esta percepción sólo basta con encontrar otro tipo de historias. Bajo esa lógica, la red se ha acercado a un “un montón de gente” con diferentes emprendimientos que también son “innovadores” o que agregan “innovación a un sector”, porque es un “producto nuevo” en el sector o nuevo “en el entorno en el que se va a desarrollar” o que “utiliza otros procedimientos diferentes”, contó.

“Entonces, hay otro tipo de emprendimientos que son dinámicos que tienen un valor diferencial sin ser de alta innovación, tienen una diferencia respecto a lo que hay en el mercado y, además, son capaces de generar mano de obra, son capaces de crecer de manera un poco más rápida que otros emprendimientos y eso es un poco también lo que termina moviendo la aguja en determinadas localidades”, explicó Trías.

En relación a las áreas más viables para emprender en Uruguay, Trías sostuvo que, desde su perspectiva, “no hay un área que sea priorizada”. “En todo el Uruguay hay distintos sectores o verticales productivas, dependiendo del lugar, en los que se puede emprender”, señaló. En ese sentido, la coordinadora consideró que lo “importante” es “visualizar el entorno”. “Si estoy en Treinta y Tres, donde tenemos el arroz y la cadena arrocera como una vertical productiva fuerte, puedo identificar en qué partes hay más oportunidades y emprender aportando valor a esa cadena que ya existe”, comentó. De todas formas, reconoció que es cierto que el área de la tecnología es un espacio con “muchísimas oportunidades” y en la que hay mucho “talento” en el país. También mencionó la “economía plateada” que si bien es un “sector que siempre estuvo se está mostrando mucho más”.

Trías sostuvo que en Uruguay también hay muchos “emprendimientos tradicionales” y de “autoempleo”, porque mientras algunas personas emprenden por una necesidad, otras lo hacen por una necesidad propia de generar una fuente de ingresos. Esto quedó “muy a la vista” durante la emergencia sanitaria por covid-19, cuando muchas personas se quedaron sin trabajo, no lograban insertarse en el mercado laboral y comenzaron a emprender como una alternativa para satisfacer sus necesidades y las de su familia. Frente a ese contexto la red tuvo que “generar condiciones y recursos para ese tipo de emprendimientos, que de repente no son los que tienen más apoyo ni más visibilidad”, apuntó.

Semana Emprendedora 2022

“La Semana Emprendedora Global es un movimiento a nivel mundial que a esta altura suma más de 200 países. Uruguay participa de esta iniciativa desde hace más de 15 años”, dijo Trías. Durante una semana se realizan “actividades de inspiración” como presentar “historias emprendedoras de todo tipo” para motivar a más personas a emprender, explicó la coordinadora de la red. “No sólo se presentaron testimonios de quienes generaron una aplicación y despegaron. También relatos de quienes tienen un emprendimiento productivo en el interior o quienes están empezando a emprender o de quienes compiten en actividades de robótica a nivel de las escuelas o liceos”, comentó. “El objetivo de la semana es mostrar esa actitud y contagiar ese espíritu”, agregó.

Esta edición, liderada por la organización Endeavor, consistió en unas 40 actividades en todo el país desde “espacios para inspirar y escuchar historias de éxito” hasta “talleres para fortalecer capacidades de quienes ya están emprendiendo” como cursos de finanzas, marketing, redes sociales o comunicación, sostuvo Trías. A su vez, en Montevideo, se llevó a cabo la segunda edición de Espacio Emprendedor organizada por ANDE y el Parlamento entre el 18 y 19 de noviembre. Se trató de una feria en la explanada del Palacio Legislativo con 100 stands para recorrer, un espacio gastronómico y actividades y espectáculos para fomentar la cultura emprendedora en el país.

“La Semana Emprendedora Global es una buena excusa para contar todo el apoyo que existe en Uruguay para quienes quieren emprender, pero es sólo una semana. Hay actividades e instituciones que trabajan en esto todos los días del año”, enfatizó Trías. Esa información está disponible en el portal Uruguay Emprendedor, donde las personas interesadas podrán encontrar “toda la oferta para emprender en Uruguay”, además de actividades virtuales y presenciales en su localidad, “cursos de formación y herramientas”, una lista de todas las instituciones que apoyan estas iniciativas y una “guía virtual” de emprendimientos para “dar visibilidad a los proyectos uruguayos”.