Los marcadores negros, los papeles blancos gigantes y los post-it de colores volvieron a salir este martes de la caja para quedar a disposición de un nuevo encuentro sobre innovación cooperativa, que se desarrolló en el espacio de la diaria Lab. Fue el tercero de los cinco encuentros que contempla el proyecto que llevan adelante la Federación de Cooperativas de Producción del Uruguay (FCPU), Incubacoop y la diaria, con el apoyo de la Agencia Nacional de Desarrollo, para generar un espacio de intercambio y de trabajo entre cooperativas vinculadas a medios, comunicación y tecnologías de la información y la comunicación (TIC).

Durante el encuentro anterior, que tuvo lugar el 31 de mayo, las y los participantes reflexionaron en torno a qué prácticas, procesos y condiciones necesitan las cooperativas para poder innovar. En esta nueva instancia, la propuesta fue ordenar ese material para crear un canvas (“lienzo de modelo de negocio”) que ayude a pensar antes de comenzar un proceso de innovación. La tarea era construir una plantilla de gestión estratégica que incluya los elementos a tener en cuenta a la hora de iniciar ese proceso –muchos de los cuales surgieron en el taller previo– y los pasos a dar, pero que además, y sobre todo, se adapte a la realidad cooperativa.

“El canvas no hace magia, no genera ideas innovadoras; la cuestión es que te ayude a que, cuando empezás un proceso, no se te escapen cosas que son importantes”, explicó a la diaria Daniel Carranza, cofundador de DATA Uruguay, consultor del proyecto y facilitador de los encuentros. “No es exactamente una hoja de ruta, porque la hoja de ruta depende de lo que querés lograr, pero sí una especie de check list o lista de comprobación de todas las cosas que necesitás tener en cuenta para que el proyecto salga lo mejor posible”, detalló.

La actividad contó con la participación de 18 personas, representantes de 12 cooperativas: Ánima Gestión Cultural, Cooperativa Integral Consultora (CIC), Cooperativa de Ahorro y Crédito del Centro de Suboficiales Navales (Cacson), FCPU, Incubacoop, Kreativa, La Diaria, Ladrillo, Mediared, Radio Cooperativa, Radio Pedal y Subte.

Durante una primera parte, los participantes se dividieron en cuatro grupos para agrupar y clasificar los elementos identificados en el segundo taller en distintos bloques temáticos comunes. Carranza explicó que cada uno de los bloques temáticos “representa una etapa del proceso de innovación” y cada tema “un elemento a considerar”. Algunos de los temas que surgieron en el segundo encuentro fueron capacitación, liderazgo, diálogo e intercambio, evaluación, investigación, planificación estratégica, incentivos, recursos, diversidad, sostenibilidad y metodología.

Media hora después cada equipo puso en común su clasificación y se identificaron los puntos en los que todos los grupos coincidían. Luego, en una segunda parte, inició el debate para llegar a una agrupación única y delinear los ejes para crear el lienzo de innovación cooperativa. La idea es que en el próximo encuentro se aplique esta nueva herramienta creada, este “canvas cooperativo”, para pensar ideas reales de innovación. “Ahí nos vamos a dar cuenta de si la herramienta sirve, si no sirve, si hay cosas para mejorar, si nos faltó alguna parte, si nos sobra algo”, señaló el facilitador, e hizo hincapié en una pregunta que no debería faltar en ningún proceso: ¿cuál es el diferencial de hacer esto desde una cooperativa?

Una invitación a “salir de la caja”

Natalia Acosta integra la cooperativa Subte y fue una de las participantes del tercer encuentro. En diálogo con la diaria, aseguró que todas las instancias fueron “motivadoras” e “interesantes” porque “obligan a pensar la innovación desde la cooperativa, a ver cómo podemos mejorar los procesos y hacerlos más innovadores, que quizás es algo que en el día a día no incorporamos tanto”.

Respecto del lienzo, Acosta dijo que es “una herramienta que engloba muchas herramientas” y que ayuda a generar algunos “disparadores” y “conversaciones” que son “la parte más rica”.

Por su parte, Daniel Egger, integrante de CIC, destacó la “predisposición de todos los emprendimientos cooperativos a salir de la caja” desde el primer día. “Hay un proceso de generar un canvas, algo nuevo, que nos desafíe y que nos haga generar una herramienta propia del cooperativismo. Este tercer encuentro en particular fue muy rico en ese sentido”, aseguró a la diaria. En ese sentido, consideró que esta última instancia vino a “abrochar un montón de cosas esbozadas en las anteriores y vimos algunos resultados”.

Con la mirada puesta en el final del trayecto, Egger dijo que espera que quede “una herramienta que realmente podamos aprovechar en el cooperativismo”. A nivel de la cooperativa que integra en particular, afirmó que el propósito es “que siga enriqueciendo los procesos de reflexión y de evaluación” del trabajo que realizan. “Más allá del producto, que es el logro de los talleres, ya el hecho de venir acá nos está despertando ideas, reflexiones, intercambios, que estaría bueno buscar la forma de vehiculizar en nuestra cooperativa”, agregó.