Ante unas 300 personas, la lista 4198, conformada por la unión de las corrientes internas del PIT-CNT, Articulación y En Lucha, realizó este jueves en el Club Progreso una presentación en la que expuso algunos de los lineamientos que rigen la alianza, que tiene entre sus objetivos fortalecer más al PIT-CNT.
La agrupación, que reúne actualmente a unos 25 sindicatos a nivel nacional, llegó en el último congreso del PIT-CNT a expresar una alianza electoral bajo el lema “Construyendo unidad”, “con la profunda convicción de que es necesario tener mayores niveles de unidad en la diversidad para afrontar los desafíos continuos del día a día”.
En la actividad, hicieron uso de la palabra los dirigentes José Lorenzo López (Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado, COFE), Alejandra Pereira (Federación Uruguaya de Magisterio, FUM), Mariana Píriz (Asociación de Funcionarios de UTU, Afutu) y Milton Castellanos (Instituto Cuesta Duarte).
Quien abrió la oratoria fue López. “Queremos dar una estructura más importante para fortalecer al movimiento sindical y a la central sindical”, manifestó. Recalcó que, en el marco de la construcción de corrientes sindicales fuertes, “más allá de las diferencias de opinión, planteamos tener unidad en la acción, y lo queremos demostrar con hechos concretos. Esta alianza que estamos haciendo entre Articulación y En Lucha, de alguna manera, marca un proceso en el que ojalá podamos seguir avanzando y nucleando a otras orientaciones, para fortalecer fundamentalmente al movimiento sindical”.
Para el dirigente, “si nos quedamos pensando, como algunos compañeros todavía añoran, y creo que es legítimo, en el Uruguay de las grandes industrias y fábricas con grandes chimeneas, donde se nuclearon muchos trabajadores, de alguna manera, nos estamos equivocando con respecto a la realidad y la organización del trabajo en el mundo actual”.
Las expectativas que no se logran concretar “se pueden transformar en desilusión”
En referencia al gobierno actual, dijo que se han generado muchas expectativas, y que “si esas expectativas no las logramos concretar, se pueden transformar en desilusión. Eso es lo peor que nos puede pasar”.
En ese sentido, agregó que “teniendo los pies en la tierra y sin pensar en locas pasiones, creemos que el cambio de un gobierno de derecha, que planteó un presupuesto de ajuste fiscal que lo pagaron los trabajadores y los sectores más desprotegidos, a un gobierno de izquierda genera expectativas”. “Si bien hemos sido claros y concretos, más allá de alguna manifestación pública que ha habido, no estamos de acuerdo cuando se dice que hay un presupuesto de continuidad. El presupuesto anterior fue de ajuste y este es un presupuesto que tiene incremento. Es insuficiente, por supuesto que lo es, pero tiene incremento. Como en la escuela, este gobierno puede y debe rendir más”, dijo López.
En tanto, Pereira destacó en su intervención que “hoy la expansión del capitalismo financiero y las grandes empresas transnacionales imponen los intereses a toda costa. Hay cambios en el trabajo que pasan a automatizarse perdiendo nuestros puestos de trabajo. Nos encontramos en un mundo donde existe la precarización laboral, la crisis climática, la persecución de los migrantes, el aumento del flujo migratorio y la vandalización de los conflictos internacionales”.
Sostuvo que “en Uruguay hay cambios en el mundo del trabajo. Esa automatización y la concentración productiva genera desempleo. Hoy tenemos tercerizaciones, no sólo en el Estado. También hay informalidad, y tenemos salarios sumergidos en los veinticinco mil pesistas, y gente que gana menos de esos 25.000 pesos por mes”.
La dirigente agregó que es fundamental “que el PIT-CNT sea defensor de la clase trabajadora, pero que tenga una mirada focalizada en los más desprotegidos, porque no hay que olvidarse que a los que no tienen voz es nuestra responsabilidad darles esa voz, trabajando para que exista un país más justo, más democrático y solidario”.
Finalmente, al cierre de la actividad, Castellano expresó que los “une un método de trabajo”, “la pluralidad” y “la democracia”. “Nos une también la transparencia. Y con eso queremos construir ideas. Ideas que haremos a nuestra manera, sin desconocer que existen otras formas y otras corrientes que tienen el derecho de hacerlo. Estamos para la construcción, ¿por qué?, porque no existiría el movimiento sindical uruguayo con las características que tiene si no existieran las corrientes sindicales, entre ellas, la nuestra. Eso es un hecho importante para tener en claro por qué tratamos de construir”, agregó.
Para el dirigente, la corriente “tiene que darle la masa crítica, el músculo, a las organizaciones sindicales”, y para eso “hay que meterse en temas más profundos de discusión”, entre ellos, “instalar el debate de qué sindicatos queremos tener”. “La estructura sindical de este país tiene aproximadamente 60 o 70 años, hecha y construida en una etapa histórica de Uruguay. Nos preguntamos: ¿es la misma etapa histórica que tenemos hoy? Tenemos distintas realidades. No podemos seguir respondiendo a la necesidad de los trabajadores del movimiento sindical con la misma estructura que teníamos. Hay cambios que se deberían discutir y analizar”, concluyó.