Dirigentes de la Unión de Trabajadores Agroindustriales del Uruguay (Utrau) se reunieron con la subinspectora general del Trabajo, Andrea Bouret, para dialogar sobre la siniestralidad de los últimos meses en el sector y la muerte de tres trabajadores en accidentes laborales.

Consultado sobre la reunión, el secretario general de la Utrau, Germán González, dijo a la diaria este viernes que se habló “de la necesidad de más controles y, por tal motivo, la Inspección General del Trabajo y la Seguridad Social (IGTSS) planteó convocar en la próxima semana a la comisión tripartita rural, a través de la Consejo Nacional de Salud y Seguridad en el Trabajo (Conassat)”. Esa comisión se denomina Consejo de Salud y Seguridad Rural y está amparada por el Decreto 321/009, que responde a la reglamentación del Convenio Internacional de Trabajo 184 sobre seguridad y salud en la agricultura.

Ese consejo está integrado por el PIT-CNT –con representantes de la Unión Nacional de Asalariados, Trabajadores Rurales y Afines (Unatra), de la que es parte la Utrau–, empresarios y el Poder Ejecutivo, representado por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).

Comentó que, con el objetivo de contrarrestar situaciones que deriven en accidentes graves o fatales, también se imparten talleres de formación en el norte del país. En ese sentido, el MTSS analiza plantear la temática pero dividida en cuatro regiones del país, a los efectos de trabajar más en estos talleres, con representantes de las cámaras empresariales y de los trabajadores.

Respecto del accidente laboral ocurrido el martes en Rocha, en el falleció que un trabajador de 51 años, dijo que “el expediente está en una etapa confidencial, por lo que aún no accedimos a mayor información. Próximamente se nos informará un número para obtener documentación de forma digital”.

Sobre el hecho en sí, el dirigente consideró que fue “una muerte evitable”. Dijo, además, que se planteó a las autoridades de la IGTSS que, “a este ritmo, de ahora a fin de año se perderán 45 vidas más de trabajadores rurales por accidentes fatales si no buscamos una fórmula para enfrentar esta problemática”.

Ante la falta de controles y fiscalización en diversos puntos del territorio nacional, expresada por los dirigentes, González comentó que Bouret manifestó que, al asumir la cartera, “las nuevas autoridades se encontraron con un ministerio vaciado de inspectores: hay 30 inspectores para todo el país” y para todos los sectores. “Se llegó a esa cifra porque varios se jubilaron y los puestos que quedaron vacantes no fueron ocupados. Es preocupante. Y mientras sea esa cantidad, que no se enferme nadie ni se jubile nadie, porque se complicaría más aún la situación. Hay que decir también que el gobierno anterior dejó muy menguado ese cuerpo inspectivo”, expresó González. Sobre esto, afirmó que el sindicato hará gestiones a nivel político para reclamar que se aumente el personal inspectivo.

“El movimiento sindical, el sistema político, los mismos empresarios tienen que velar por fortalecer la Inspección General del Trabajo. Eso es lo que vimos y lo que entendemos que se necesita”, dijo.

Por su parte, la diaria consultó a jerarcas de la IGTSS sobre el contenido de la reunión y respondieron que la secretaría de Estado entiende que “se debe salvaguardar las garantías del debido proceso”. “Para ajustarse a la normativa, no es posible proporcionar información, especialmente del accidente. Es un tema reservado”, alegaron.