La Cámara de Industrias Pesqueras del Uruguay (CIPU) y la Cámara de Armadores Pesqueros del Uruguay (CAPU) se reunieron este miércoles con la directora nacional de Trabajo, Marcela Barrios, para evaluar el conflicto que atraviesan los empresarios con el Sindicato Único Nacional de Trabajadores del Mar y Afines (Suntma).

En la convocatoria, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) presentó una propuesta, que las cámaras aceptaron y que consiste en crear un grupo de trabajo en el ámbito de la secretaría de Estado, conformado por las gremiales empresariales, el Sindicato Único de Patrones de Pesca, el Suntma y el PIT-CNT. El objetivo de este grupo es “optimizar las condiciones en que se llevan a cabo las guardias y los tiempos de descanso, y, a largo plazo, analizar variables que posibiliten ampliar dichas mejoras”. El grupo será convocado por el MTSS para reunirse a la brevedad, una semana después de haberse normalizado el trabajo en los barcos.

Por medio de un comunicado emitido este jueves, las dos cámaras empresariales del sector pesquero explicaron que la reunión con el MTSS se propuso “buscar soluciones para volver a trabajar en los barcos y en las plantas de procesamiento de pescado”. “Son más de 3.000 personas que quieren trabajar y no pueden. ¿Por qué? Porque el Suntma, citando el artículo 57 de la Constitución, referido al derecho de huelga, se niega a trabajar”, sostienen las gremiales.

En el texto se sostiene que se han planteado tres motivos para explicar esta medida de paro de los trabajadores. “La primera, que la dirigencia del Suntma dice que la guardia de puente no es una tarea que le corresponda a un marinero. La segunda, que argumentan que no están preparados para hacerla. En tercer lugar, que afirman estar muy cansados para hacerla”.

En referencia al primer punto, las cámaras empresariales aseguran que “fue el propio Suntma quien definió como una de sus “actividades clave” realizar “la guardia de puente según directrices del patrón”.

Con respecto al segundo punto, afirman que “es muy grave que los marineros expresen que no están preparados para cumplir con una tarea para la que fueron capacitados, ya que sin esos conocimientos básicos, la Prefectura Nacional Naval no les hubiera otorgado la libreta de embarque.

Por último, con relación al tercer punto, las dos cámaras señalan que se comenzó a realizar un estudio detallado de los tiempos de trabajo y de descanso de la tripulación en los viajes de pesca, a partir de las grabaciones de las cámaras de seguridad instaladas en todos los barcos.

Tanto para CIPU como para CAPU, en definitiva, la única condición para avanzar en este camino “es que el Suntma habilite la salida de los barcos en forma inmediata, en el marco del convenio colectivo vigente hasta abril de 2027”, el cual “debe ser respetado por todas las partes, tal como lo han hecho las empresas”.

Días atrás, el Suntma emitió un comunicado en el que expresa su “profunda preocupación ante las maniobras de desinformación y desprestigio impulsadas por las cámaras empresariales”, a las que acusa “de intentar instalar una versión distorsionada de la realidad” que se vive “a bordo de los buques nacionales”.