La Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) resolvió “declararse en alerta y mantenerse en sesión permanente” ante la decisión de la empresa Conaprole de cerrar la planta 14 de Rivera. Asimismo, en un comunicado el sindicato advirtió sobre la situación de la empresa Lactalis Parmalat Colonial Granja Pocha, que “estaría evaluando la alternativa de reabrir la planta”, pero de forma zafral y con la “pretensión de aplicar rebajas salariales”.

Sobre esto último, la FTIL aguarda “expectante” por el resultado de una reunión con la empresa que tendrá lugar este jueves en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, “como así también sobre lo que sucederá entre la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole y los representantes de la empresa”.

Asimismo, la FTIL “observa con suma atención el proceso que se está desarrollando de cara al remate de la planta de Calcar”. El sindicato aboga por “un proyecto que tome en cuenta de manera prioritaria el mantenimiento de los puestos de trabajo”.

Con relación a la decisión de Conaprole, Enrique Méndez, dirigente de la FTIL, dijo a la diaria que “la empresa tiene una planta industrial en Rivera, que al día de hoy es rentable y da más de un millón de dólares de ganancia por año”. Puntualizó, no obstante, que, “dentro de 24 o 36 meses, si se mantiene la proyección de los últimos años, podría llegar a dar pérdida en ese momento”.

Según Méndez, se trata de una resolución “extremadamente errada e insensible”. Conaprole, sostuvo, “toma la definición de anunciarnos que al 31 de octubre pretende estar cerrando la planta, y nosotros decimos que es de una irresponsabilidad brutal para con las trabajadoras, los trabajadores, la ciudadanía y el Estado”.

“En un momento en el que venimos discutiendo las grandes dificultades que está viviendo la población, con situaciones extremadamente vulnerables, el estar tomando una definición en el departamento de cerrar una planta que está dando ganancias… ¿Para qué?”, manifestó Méndez.

En tal sentido, el dirigente de la FTIL afirmó que la resolución de la empresa tiene como objetivo “ganar más y más”. “Hemos rechazado profundamente esta propuesta y estamos esperando porque el equipo negociador del Ministerio de Trabajo nos pidió esta semana de tiempo para trasladar esto a las autoridades”.

Por otra parte, con respecto a la situación en Lactalis-Parmalat, Méndez dijo que la empresa, además de anunciar que “sólo podrían abrir la planta de forma zafral momentáneamente”, planteó que “para volver a procesar en Cardona hay que aplicar una rebaja salarial”. “Es un accionar que no es nuevo dentro de las formas de acción de las empresas de carácter multinacional. Preocupa mucho, y en la industria láctea esto no lo aceptamos”, subrayó.