Luego de la victoria de Yamandú Orsi el pasado domingo, usuarios de redes sociales afines al aún oficialismo no demoraron en señalar el supuesto estado con el que el próximo gobierno recibirá algunos indicadores sociales. El texto, viralizado en diversos posteos, fue analizado por la diaria Verifica.
Pobreza e indigencia
La publicación señala que la pobreza actualmente se encuentra en 6,4% y la indigencia en 0,3%. Estos datos coinciden con los porcentajes de hogares en situación de pobreza informados por la Encuesta Continua de Hogares del Instituto Nacional de Estadística (INE) del pasado octubre.
Sin embargo, ese mismo informe sitúa a la población por debajo de la línea de pobreza en el entorno de 9,4% y en situación de indigencia en 0,4%. Estos indicadores sufrieron una leve mejora en el último quinquenio, ya que en febrero de 2020 las personas en situación de pobreza se ubicaban en 11,6%, mientras que la indigencia permaneció estable en 0,4%.
Economía
El déficit fiscal fue uno de los temas que estuvo sobre la mesa durante toda la campaña. El gobierno, que asumió en 2020 con la premisa de “ordenar la casa”, no logró contener el gasto público al nivel que se había propuesto en un comienzo. De acuerdo al posteo, el déficit fiscal se ubica actualmente en -4,2%, lo cual coincide con los datos a setiembre publicados por el Ministerio de Economía y Finanzas.
El punto crítico en materia fiscal de esta administración se dio en agosto de 2020 cuando el déficit alcanzó el -6,1% producto del aumento del gasto público apelado por el gobierno para contener los estragos causados por la pandemia de covid-19. A partir de allí, el desbalance comenzó a retroceder hasta un déficit de -2,6% en setiembre de 2022, que, sin embargo, sufrió un aumento sostenido a partir de entonces hasta alcanzar la cifra actual.
Respecto a la evolución del índice de precios, la inflación actual anualizada se ubica en 5,1%, tal como señala el posteo, y actualmente representa poco más de la mitad del nivel de febrero de 2020, cuando cerró en 9,2%. Por otra parte, el dólar interbancario se ubica a la fecha en 43,2 pesos, lo que representa un aumento nominal respecto al 1º de marzo de 2020, cuando cotizaba en el entorno de 38 pesos por dólar.
Asimismo, las reservas del Banco Central del Uruguay (BCU) se mantuvieron estables y el próximo gobierno recibirá, de no haber variaciones durante el próximo trimestre, un total de reservas brutas de 18.840 millones de dólares, de acuerdo al informe del organismo al cierre de setiembre. Al cierre de marzo de 2020, las reservas del BCU alcanzaban 15.340 millones de dólares.
Salario y desempleo
El INE informó en octubre que la tasa de desempleo se ubicaba en 7,3%, coincidente con el posteo, lo que representa uno de los meses con mejor desempeño de esta administración, sólo por encima de noviembre de 2021, cuando representaba 7%. El aumento del empleo fue uno de los logros señalados por esta administración, que superó la cifra de 80.000 nuevos puestos de trabajo durante el quinquenio. Además, solventó el deterioro ocurrido durante el período de pandemia, en el que alcanzó 11,2% en setiembre de 2020.
La publicación señala que el salario mínimo nacional (SMN) actual estaría en el entorno de 580 dólares, cifra que es errónea. El último aumento de enero decretado por el Poder Ejecutivo situó al SMN en 22.268 pesos, lo que se traduce en 518 dólares de acuerdo al cambio actual. No obstante, el SMN sí representó esa cifra en dólares en mayo de este año, cuando el tipo de cambio se ubicaba en 38,4 pesos por dólar.
Mortalidad infantil y homicidios
Uno de los datos totalmente erróneo es el que refiere a mortalidad infantil, ya que el Ministerio de Salud Pública (MSP) sí registra defunciones neonatales en hospitales. En 2023, el MSP informó el fallecimiento de 229 menores de un año en todo el país, equivalente a 7,3 cada mil nacidos vivos, y que significó un aumento de 28 casos respecto al año anterior.
Sin embargo, los expertos señalan que este tipo de registros se evalúan a largo plazo, por lo que en la administración actual no es posible señalar un aumento significativo que establezca un cambio en la tendencia.
Por otra parte, la tasa de homicidios de 11,1 cada 100.000 habitantes corresponde al dato del primer semestre de 2024, siendo este uno de los peores resultados históricos sólo por detrás de 2018, cuando se alcanzaron los 12 homicidios cada 100.000 habitantes. Esto implicó un aumento respecto a 2020, año en que esta tasa se ubicó en 9,7% de acuerdo a los datos del observatorio de estadística del Ministerio del Interior.