La directora del Programa Prioritario de ITS/Sida, del Ministerio de Salud Pública (MSP), María Luz Osimani, presentó datos en relación con esta enfermedad. De acuerdo a las estadísticas, Uruguay presenta cifras bajas en la población general pero se concentra en algunas poblaciones más vulnerables, como trabajadores sexuales masculinos (19,3%), hombres que tienen sexo con hombres (9%), personas privadas de libertad (5,5%) y usuarios de drogas que se aplican de manera intravenosa. “Eso preocupa y es en lo que tenemos que trabajar con más fuerza. También es importante trabajar con los jóvenes, especialmente entre los mayores de 14 años, que es la franja en la que aparece inicialmente la infección. También es importante prevenir la transmisión vertical, que se puede producir de las mujeres embarazadas a sus bebés”, dijo.
Con respecto a este último punto, Osimani destacó la importancia de la responsabilidad de los padres. “El bebé no es solamente responsabilidad de la mujer embarazada, también lo es de su pareja. Es importante que ambos se responsabilicen para prevenir enfermedades como la sífilis congénita y el VIH. En el caso de la sífilis muchas mujeres se tratan y controlan pero luego su pareja no lo hace, entonces ella se vuelve a infectar y el niño nace con sífilis congénita. Ése es un problema sobre el que estamos trabajando”, explicó. Actualmente la transmisión de madres embarazadas a sus hijos representa el 2,5% de los casos de VIH. “Si la mujer llegara a tiempo al control de embarazo, lograríamos que de 100 mujeres solamente 2 corrieran el riesgo de tener un niño con VIH”, explicó. Por este motivo la nueva campaña del MSP referida al VIH/sida se centra en la prevención de la transmisión de madre a hijo y en el protagonismo que deben tener los varones en el asunto. También se trabajó de forma coordinada con la Administración de Servicios de Salud del Estado para implementar en el primer nivel y en la puerta de emergencia de hospitales el test rápido de VIH y sífilis, para poder captar y tratar también al hombre que llega.
Osimani destacó el trabajo realizado en los centros educativos, la incorporación de la educación sexual en todos los niveles de enseñanza, y la promoción del uso de preservativos. “Todavía sigue existiendo la dificultad de negociar el uso del preservativo y de poder decir ‘no’ cuando uno no quiere tener una relación sexual porque no se siente seguro. El preservativo debe ser cada vez más accesible y debe estar en el bolsillo del caballero y la cartera de la dama”, sostuvo. Para eso el MSP aumentó la compra de condones de un millón en 2005 a casi 10 millones para 2010.
Los tratamientos de los que se dispone actualmente permiten a las personas con VIH tener una mejor calidad de vida que cuando comenzó a expandirse la enfermedad. Sin embargo, según Osimani, todavía preocupa el modo en que los pacientes siguen los tratamientos. “Muchas veces el tratamiento se inicia y se abandona, por lo tanto, cuando los pacientes lo vuelven a retomar deben hacerlo con una medicación más agresiva y costosa para su cuerpo y para la sociedad”, señaló.
Para la presidenta de la Comisión de Pacientes del Servicio de Enfermedades Infecto Contagiosas, Laura Pérez, la transmisión va en aumento. “Vemos que hay cada vez más gente; acuden al hospital unas tres nuevas personas con VIH por día”, señaló. Entre los avances alcanzados destacó la eficiencia de los medicamentos y los tratamientos que se aplican hoy en día. “Todos tenemos los medicamentos originales y genéricos con los controles correspondientes, pero hasta hace dos años la calidad era muy mala”, dijo. Al igual que Osimani, Pérez señaló la falta de adherencia a los tratamientos. “En el próximo año vamos a trabajar con la Organización Mundial de la Salud para estimularla”, explicó.
Respecto de los temas pendientes, Pérez dijo que todavía sigue existiendo una fuerte discriminación, sobre todo en el ámbito laboral. Agregó que contra eso no los ampara ninguna ley.