Pensar la diversidad

Este setiembre también se cierra con el III Seminario Académico de Género y Diversidad Sexual que se realiza desde hoy hasta el jueves en la sala de conferencias de la Facultad de Ciencias Sociales (Udelar). Habrá mesas redondas con investigadores uruguayos e internacionales sobre “Estado-nación y giro a la izquierda en América Latina: la politización de la sexualidad”, “La agenda LGTTTBQ en la región” y “Teoría queer y producción cultural LGTTTBQ”.

“Éramos 15 personas, era una cosa muy tímida, ni siquiera llegó a ser una marcha, sólo una concentración en la plaza Libertad con volanteada y una pancarta que decía ‘Orgullo homosexual’. ¿La prensa? Sólo una foto en un diario, una o dos líneas. Pero fue un gran acto, interesante”. Así relata a la diaria lo sucedido el 28 de junio de 1992 uno de sus participantes y posteriormente coorganizador, Fernando Frontán. Los acompañaba un círculo de gente que sabía de la convocatoria y que se reunió alrededor aunque sin acercarse demasiado. La iniciativa marcó una forma de protesta, visibilización y acto político-cultural que ahora reúne a 12.000 personas y se hace el último viernes de setiembre. Motivaciones, objetivos, movilización, organización, dimensiones y repercusión han ido modificándose a lo largo de las últimas dos décadas en Uruguay. Acerca de estos cambios y sus implicaciones también conversamos con Denisse Legrand y Diego Sempol, ambos integrantes de dos organizaciones que participan en la coordinadora de la Marcha por la Diversidad 2010, ProDerechos y Ovejas Negras, respectivamente (ver recuadro).

Frontán y Sempol coinciden en que la transición hacia la democracia fue determinante para que el movimiento de lesbianas, gays, trans y bisexuales (LGTB) pensara en organizarse. “Hay que entenderlo como parte de la politización creciente de la sociedad uruguaya en la transición. Frente a la resistencia a la dictadura todo el mundo se politizó a diferentes niveles, mediante comisiones vecinales, grupos de mujeres, cooperativas de vivienda y de trabajo, entre otros. Pero también hay que enmarcarlo en una izquierda que aún era brutalmente homofóbica y patriarcal, a duras penas aceptaba el feminismo. En ese contexto y al tener que operar clandestinamente por la represión real de la Policía, no se podía articular con otras organizaciones sociales o políticas”, explicó Sempol.

En 1993 se marchó por primera vez. La intención de los convocantes era hacerlo desde la Universidad de la República (Udelar) hasta la plaza Libertad porque uniendo esos dos puntos se pretendía simbolizar la lucha por derechos y la despatologización de la homosexualidad. Pero el permiso fue otorgado sólo para hacerla desde el Obelisco hasta la explanada de la Udelar porque si bien se estaba bajo la primera gestión de izquierda en Montevideo, desde el gobierno nacional, entre otras cosas, el Ministerio del Interior mantenía las razzias y el fichaje de LGTB. “Fue un paso importante, fuimos entre 50 y 100 personas. Gran parte era población solidaria, de otras organizaciones sociales, de la Universidad, del feminismo… ajena a la comunidad”, describió Sempol.

“La homofobia es un mecanismo de opresión y la primera forma que establece es el secretismo de tu identidad u orientación. El hecho de llevar eso a una reivindicación política, a un espacio público, implica romper una cantidad de cosas aprendidas durante todo tu proceso de socialización, durante el cual se te enseñó que jamás debías visibilizar. Entonces vos veías que la gente cuando participaba estaba en estado de tensión y nerviosismo, porque eso implicaba romper más de 20 años de opresión”. De esta manera describió Sempol aquel contexto.

Ya al año siguiente, como la Policía no había intervenido en la manifestación, el temor era menor y el número de participantes creció. Lo que permanecía sin cambios era la ausencia de diálogo con el sistema político. Recién en 1997, apadrinados por Margarita Percovich y Jorge Zabalza, consiguieron que la Junta Departamental instalara la primera Semana de la Diversidad, incorporando en el debate a otros grupos discriminados, como afrodescendientes, mujeres o personas con VIH. Los entrevistados sostienen que el vínculo con los partidos políticos era inviable porque una relación institucional era otro acto de visibilidad: “Para el sistema no era legítimo recibir a personas gays o lesbianas en sus despachos”, precisó el integrante de Ovejas Negras.

Sumame

La Marcha por la Diversidad 2010 será el viernes desde las 19.00. Parte de plaza Independencia rumbo a la plaza Libertad por la avenida 18 de Julio. La coordinación está integrada por FEUU, Fudis, Ovejas Negras, HPI, Amnistía Internacional, ProDerechos, Área Académica Queer, Cotidiano Mujer, MYSU, grupos autónomos, CNS Mujeres, PIT-CNT, y Gays y Lesbianas de Izquierda. Cuenta con el apoyo de la Dirección Nacional de Cultura del MEC y de la Secretaría de Juventud y Programa Esquinas (Intendencia de Montevideo). Legrand y Sempol indicaron que recientemente se ha sumado ADDUR-Extensión a este colectivo y que siempre han contado con el apoyo del rectorado, aunque no de la Udelar como tal, o de otros organismos públicos. Ambos expresaron que hay distintas formas para que las instituciones participen y recordaron que el actual ministro de Educación, Ricardo Ehrlich, fue el primer intendente en asistir y que la actual jefa capitalina, Ana Olivera, también se sumaría este año.

Romper la tradición

En ese momento, y acompañando una tendencia regional, se empezó a abandonar el término ‘orgullo gay’ para redireccionar el contenido -y no sólo la forma- hacia ‘diversidad sexual’-. La caída generalizada de participación y militancia no era la excepción en el movimiento, pero apariciones mediáticas desde programas televisivos como el conducido por Omar Gutiérrez hasta el de Ángel María Luna, entre otros factores, revirtieron la situación y por primera vez no se pidió permiso y se marchó desde el monumento al Gaucho (“la tradición”) hasta la plaza Libertad. Fueron 500 personas.

En la década del 90 el debate sobre la despatologización dio paso a reposicionarse políticamente desde otro lugar: no era tanto un problema de discriminación, sino de derechos civiles y humanos. Estos cambios motivaron que la Marcha por la Diversidad comenzara a transitar independiente de la del Orgullo Gay. La decisión, que provocó divisiones, se apoyó en un consenso latinoamericano de que cada comunidad debe tener sus fechas de referencia propias.

“Las del 90 eran marchas del orgullo y nosotros no estábamos muy de acuerdo con esa concepción; estaba bien estar orgulloso, pero en realidad no importaba tu identidad de género u orientación sexual para ser parte de un proyecto político que luchaba contra la cultura homofóbica, por lo que la convocatoria tenía que ser mucho más abierta y articulada con otros movimientos sociales”, recordó Sempol.

En 2004 la coordinación pretendida desde los discursos se llevó a la práctica. Los organizadores de hoy creen que se tejió “un campo de activismo político de la diversidad que ahora deja de estar hegemonizado por la diversidad sexual” e involucra a organizaciones sociales que tienen fines comunes: “La ampliación de los derechos en la sociedad, por un Estado laico y por una cultura que sea inclusiva y no discriminatoria, cuestiones étnicas, de clase o lo que sea”, apuntaron Legrand y Sempol. Bajo esta consigna, desde hace un par de años participa ProDerechos, un grupo de jóvenes de izquierda que trabaja en cuatro áreas: salud sexual y reproductiva, anulación de la Ley de Caducidad y reconstrucción de la memoria, diversidad y género, y consumo responsable de drogas. “Nos integramos porque creemos que la conquistas de derechos es un tema que nos compete a todos. Si bien no somos un grupo LGTB, como ciudadanos nos ocupa el trabajo de sus derechos porque son los de toda la ciudadanía. Asimismo, la marcha concibe una diversidad sexual que nos involucra también a los heterosexuales”, opinó Legrand, delegada en la coordinación. “La diversidad es de todos y no es un tema exclusivo de la comunidad LGTB. El derecho a la identidad de género o a la adopción son derechos de toda la ciudadanía, no sólo de la población heterosexual o LGTB; los mismos derechos con los mismos nombres, sin ciudadanos de primera o de segunda categoría”, subrayó.

Sempol convocó: “Si no sos cómplice de un cultura discriminatoria y estás efectivamente en contra de la homofobia, vení y participá de este espacio y articulá para conformar efectivamente un polo social y político que empiece a hacer ruido y mover el tema de la discriminación en nuestro país. Yo voy a la Marcha del Silencio y no tengo ningún familiar desaparecido, pero estoy comprometido con los derechos humanos y con la lucha contra la impunidad”.

Y por casa

La articulación también debió procesarse dentro del movimiento pues “debíamos lograr romper la visión, adentro mismo, de que sólo nos referimos a cuestiones LGTB y no al resto de la agenda social. Y ser neutrales en ciertas disputas sociales es una forma de ser cómplice de quienes tienen el poder. Nuestra agenda no es sólo lo gay-lésbico-trans sino que hay que concebirla transversalizada en otros problemas y agendas. Así, vamos al acto del 1° de mayo y al del 14 de agosto”, ejemplificaron desde Ovejas Negras.

Con este impulso y sin perder el carácter festivo, se llega a 2010 con una proclama que abordará los logros y asuntos pendientes en tres temáticas: matrimonio igualitario, porque si bien la unión concubinaria “fue un paso muy importante”, creen que el matrimonio es otra institución que debe democratizarse; políticas efectivas de inclusión social para la población trans, “pues se precisa acompañar los derechos legales logrados en la pasada legislatura con acceso real a la salud, educación y trabajo”, y la despenalización del aborto.

Respecto al primer punto, Sempol informó que están llegando “muy buenas señales” desde la Udelar, Infamilia (Mides), el Frente Amplio y algunos sectores del Partido Colorado, y que trabajar con el Partido Nacional “es más complejo porque ha sido un solo corazón con la Iglesia Católica y es el que más ha golpeado sistemáticamente todos los avances legislativos”.